Dirigentes de países europeos y árabes piden un alto el fuego duradero

La comunidad internacional arropó ayer al presidente egipcio, Hosni Mubarak, después de que Israel anunciara la noche del sábado un alto el fuego unilateral y menospreciara los esfuerzos mediadores de El Cairo para poner fin a la incursión militar en la franja de Gaza. Los jefes de Estado y de Gobierno de Francia, España, Italia, Alemania, República Checa, Turquía y Jordania, además del secretario general de la Liga árabe y el presidente de la Autoridad Palestina, se presentaron ayer en Sharm el Sheij (Egipto), convocados por Mubarak sólo unas horas antes, y hablaron de cómo pasar de un alto el fuego "volátil" a una paz duradera.

"Esto no es más que el comienzo", advirtió el presidente francés, Nicolas Sarkozy. Los pasos para lograr una "paz duradera" pasan, según los asistentes a la improvisada cumbre de ayer, por la retirada de los tanques israelíes de Gaza y por celebrar una conferencia de donantes que fuerce la apertura de los pasos fronterizos de la franja, que Israel mantiene prácticamente cerrados desde hace más de año y medio.

Naciones Unidas enviará a Gaza una misión para evaluar las necesidades de la franja y en unas dos semanas podría celebrarse la conferencia, según explicó al término del encuentro el ministro de Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos. La estimación inicial de la oficina central de estadísticas palestina cifra en 476 millones de dólares (359 millones de euros) los destrozos causados por la maquinaria bélica israelí.

"Ahora empieza lo más difícil, la paz es la tarea", dijo el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero. "España no ahorrará en esfuerzos políticos, diplomáticos, militares y financieros para que el proceso hacia la paz avance lo antes posible". Como Zapatero, los demás dirigentes europeos dijeron estar dispuestos a volcarse para aliviar el desastre humanitario. Fuentes diplomáticas explican que más allá de las políticas bienintencionadas, se trata de evitar a toda costa que Hamás saque partido político de la reconstrucción de una franja hecha trizas. Frenar la entrada de armas al territorio, como exige Tel Aviv, es otro de los pilares sobre los que debe asentarse una paz duradera, según los presentes en Sharm el Sheij.

Francia -copatrocinadora de la cumbre-, Reino Unido y Alemania anunciaron su ofrecimiento a los Gobiernos de Israel y Egipto de poner a su disposición medios técnicos y militares, incluidos buques, para acabar con el contrabando armamentístico.

Con su presencia ayer en Sharm el Sheij, los líderes europeos quisieron también dejar claro que en el intricado tablero del mundo árabe, apoyan a los que llaman "los moderados", en este caso a Mubarak, frente a países como Irán o grupos como Hamás o Yihad islámica, que la semana pasada celebraron también su propia cumbre sobre la situación en la franja de Gaza.

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