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LUIS MONTES | Ex coordinador de Urgencias del hospital de Leganés | EL HOSPITAL DE LEGANÉS

De director médico del hospital La Paz a la sospecha permanente

Luis Montes, anestesista de 56 años, es un profesional respetado por sus compañeros de urgencias. Pese a su carácter hosco, a veces brusco, los médicos y enfermeras que trabajan con él destacan su nobleza y su gran capacidad de trabajo. Una capacidad que ha desarrollado a lo largo de treinta años de carrera en la que siempre ha defendido la sanidad pública. En los años ochenta, Montes trabajaba en el hospital de Móstoles. Allí coincidieron la mayoría de quienes hoy son jefes de servicio en Leganés. En 1987, al abrir el hospital Severo Ochoa de Leganés, Montes aceptó el cargo de jefe de Anestesia.

Montes, conocido por su talante progresista, siguió en Leganés 10 años, hasta que aceptó ser director médico del Hospital La Paz (uno de los mayores de España), según el jefe de Urología de Leganés, Fernando Gimeno. En su estancia en La Paz, ejerció de gerente en funciones durante un año. En 2000 regresó al Severo Ochoa. Su plaza de jefe de Anestesia estaba ocupada. Montes siguió de anestesista hasta que la dirección le ofreció, al año, ser coordinador de urgencias.

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"Montes puso orden. Obligó a llegar a su hora a todos los médicos y le dio más lógica al trabajo", según una auxiliar que lleva 15 años en urgencias. Su nombramiento coincide con la creación de dos habitaciones para enfermos terminales en urgencias. Allí pasan sus últimas horas, sedados si hace falta, junto a su familia.

Cuando el consejero de Sanidad, Manuel Lamela, anunció su relevo por una denuncia anónima sobre las sedaciones, muchos tuvieron un déjà vu. En 2003, una denuncia similar acabó archivada y desde entonces una comisión analiza todas las sedaciones. Montes se lo tomó como una persecución que no ha concluido. Tras su relevo, sigue como anestesista y no ha dejado de acudir al centro ningún día. "Está tranquilo, pero cuando algún compañero lo para por el pasillo y lo abraza, se emociona", según un médico. Lo único que él ha dicho es que "está muy tierno".

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