Aprobado el 'plan antipiratería', que el PP califica como "humo"

El Gobierno dio luz verde ayer, con "carácter urgente", al Plan Integral para la Disminución y la Eliminación de las Actividades Vulneradoras de la Propiedad Intelectual (conocido como plan antipiratería). El plan involucra a 11 ministerios, al ministerio fiscal y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Entre las medidas se incluye la creación de grupos especiales de la policía para luchar contra la venta ilegal en las calles y en la Red. Mientras el sector se muestra satisfecho con la medidas, el PP cree que son "humo".

Según la SGAE, el plan "coloca por primera vez a España a la vanguardia de Europa"

La portavoz de Cultura del PP en el Congreso, Beatriz Rodríguez Salmones, criticó ayer la ausencia de medidas legislativas concretas en el plan del Gobierno contra la piratería audiovisual y consideró que tras él "sólo hay humo". Rodríguez Salmones expresó su preocupación por la "levedad" del plan -que contempla cinco puntos-, que se limita a "asumir la piratería como problema". Rodríguez Salmones dijo comprender que los sectores afectados apoyen el plan, porque "es mejor que nada, aunque es lo más parecido a nada". La diputada del PP cuestionó el anuncio de que se vayan a formar unidades especializadas de policía y fiscales, y aseguró que esa especialización ya se había producido, como demuestra un aumento del 40% en la eficacia policial contra ese fenómeno.

Por contra, echó en falta reformas legales -"como las que en su momento adoptó el PP"- y que, a su juicio, deberían extenderse en función de la experiencia, así como algunas para combatir la extensión de la piratería en la Red.

La secretaria de Cultura del PSOE, Carme Chacón, respondió ayer que el plan antipiratería del Gobierno representa "un excelente punto de partida" para combatir un fenómeno delictivo contra el que los Gobiernos del PP respondieron con "pasividad". Chacón criticó al PP por no haber hecho "nada" para la lucha contra la piratería, mientras ahora ataca el plan integral del Ejecutivo socialista "antes de conocerlo".

Los Productores de Música de España (Promusicae), asociación que agrupa a la mayoría de productores españoles, manifestó su apoyo al plan. "Representa un valioso paso adelante en la protección de la propiedad intelectual en España", señaló Antonio Guisasola, presidente de Promusicae. En su opinión, se trata de un programa global muy ambicioso que implica "el reconocimiento expreso por parte del Gobierno del problema que supone para España la piratería y el robo sistemático de las creaciones culturales a plena luz del día".

La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) considera que el Plan Integral "coloca por primera vez a España a la vanguardia de Europa en la lucha contra una de las mayores y más prolongadas agresiones que ha sufrido el mundo de la cultura y de la creación".

La SGAE muestra su "satisfacción" por la aprobación de este "ambicioso proyecto" y resalta su carácter "transversal e integral", además de destacar su "clara apuesta por la sensibilización social, especialmente entre los jóvenes".

El presidente de la Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales de España (FAPAE), Pedro Pérez, dijo que celebra la inclusión en el último momento en el plan antipiratería de unas "medidas urgentes fundamentales, sobre todo en lo que se refiere a Internet".

Por otro lado, la Asociación de Internautas pidió la dimisión de la ministra de Cultura, Carmen Calvo, porque el plan contra la piratería "mezcla el top manta con el uso honesto de Internet" y porque no ha consultado a los agentes sociales. El portavoz de este colectivo, Víctor Domingo, repasó, en declaraciones a Efe, el plan aprobado en Consejo de Ministros. "Nos preocupa porque parte de un ministerio de un Gobierno socialista. Nos molesta que se mezcle el top manta [la piratería que se desarrolla en las calles] con el uso honesto de Internet; gran parte de este plan criminaliza la Red y asusta a la gente, cuando el ciudadano está pagando ya un canon por nada", declaró Domingo en relación a la remuneración por copia privada incluida en los CD y DVD vírgenes.