Huérfanos de células madre

Al igual que en otros casos, las diferencias sobre la investigación con células madre embrionarias se dirimirán en los tribunales, al que han recurrido los Gobiernos estatal y andaluz con el argumento de que se pisan competencias. La Consejería de Salud se convirtió en el primero departamento público en abrazar la investigación con células madre embrionarias frente al rechazo inicial del Ejecutivo por razones de índole religioso.

Aunque con la llegada de Ana Pastor al Ministerio de Sanidad se suavizó este rechazo con una legislación sobre reproducción asistida que abre las puertas a la investigación con limitaciones, el Gobierno decidió recurrir ante el Tribunal Constitucional la legislación andaluza aprobada antes. Desde Andalucía han respondido con recursos tanto el Parlamento como el Gobierno autonómico por considerar que se invaden competencias autonómicas en materia de investigación.

La investigación con células madre pretende reemplazar las neuronas dañadas por artificiales

En el más leve de los casos, el enfrentamiento sólo contribuye a retrasar y dividir recursos para una investigación que busca mejoras médicas. Los enfermos de aquellas patologías que podrían beneficiarse de estos avances asisten con una mezcla de estupefacción e indignación al intercambio de reproches y al cruce de recursos. "Siento vergüenza ajena, creo que es una pelea de 'quítate tú para que me ponga yo', ahora mismo pienso que el Gobierno central está actuando sin responsabilidad ninguna, parece una rabieta de niños", critica la presidenta de la Federación Andaluza de Diabéticos, Rafaela Domínguez.

Causa de ceguera

En Andalucía, según el catedrático de Fisiología Bernat Soria, hay 450.000 enfermos, pero más del 25% ignoran que lo son. Rafaela Domínguez cree que las cifras reales se desconocen, aunque la Organización Mundial de la Salud calcula que el 10% de la población padece esta enfermedad metabólica, que tiene tratamiento, pero no tiene curación, y que es uno de los principales motivos de amputación de miembros inferiores (pie diabético), de ceguera y de insuficiencia renal.

"No creemos que la diabetes se vaya a resolver mañana, pero es una esperanza y cuanto más se pare más se perjudica a todos los ciudadanos", lamenta Domínguez. Los diabéticos han contribuido al cambio de parecer del Gobierno respecto a la investigación con su movilización: la Federación Española presentó al Defensor del Pueblo más de un millón de firmas en apoyo a la investigación con células madre. La reparación de huesos y las enfermedades neurodegenerativas, como el Parkinson, que afectará al 2% de los mayores de 60 años, son otros campos que podrían beneficiarse del trabajo científico con embriones.

Y ahí entra la esperanza de las células madre. El español Ernest Arenas dirige un grupo de investigación sobre el tema en el Instituto Karolinska de Estocolmo, en Suecia."Se trata de algo muy sencillo. Intentamos conseguir crear en el laboratorio células dopaminérgicas a partir de células madre para poder implantarlas. Es un simple recambio", explica Arenas.

Este investigador insiste en que no es seguro que la técnica llegue a buen puerto, pero matiza: "Comenzamos hace tres años y lo bueno es que la puerta, la esperanza, sigue abierta. Intentamos purificar las células para conseguir que sólo existan células dopaminérgicas, sin contaminaciones para poder implantarlas". La aparición de esta investigación supuso un gran avance, pero Arenas matiza: "Es fácil avanzar mucho en enfermedades de las que se sabe muy poco".

Así pues el objetivo es cambiar un neumático pinchado por otro nuevo. "El único problema", explica Arenas, "es que estamos aprendiendo a fabricar el neumático. A veces nos sale y a veces nos sale un cubo". El Instituto Karolinska trabaja con células madre adultas y embrionarias. "No elegimos, sino que investigamos para ver cuáles forman más fácilmente las neuronas dopaminérgicas".

Modesta conoce la teoría y, aunque es escéptica sobre los avances médicos a fuerza de escuchar curas durante 17 años, sí tiene esperanza en la investigación con células madre. "Siempre hablan de los efectos de la implantación del electrodo, pero pocas veces de los problemas que pueden aparecer tras la operación, así que ya me creo poco. Pero en la célula madre sí que creo. No me servirá a mí, pero sí a los siguientes. Y es ley de vida. Yo me he beneficiado de los avances que no tuvieron quienes sufrían la enfermedad hace 20 años", explica tranquila.

Arenas sí cree que las próximas generaciones de enfermos se beneficien del tratamiento, pero espera en que sea una solución provisional. "La implantación de neuronas dopaminérgicas sintetizadas a partir de células madre es algo un poco tosco que además requiere una intervención quirúrgica. Espero que se pueda utilizar, pero en principio no creo que esté indicado para todos los casos, sino para aquellos de Parkinson juvenil".

A largo plazo, los investigadores confían en el desarrollo de nuevos fármacos que impidan la aparición del Parkinson. Hasta entonces, los enfermos, como Adolfina, tendrán que seguir practicando rehabilitación para no quedarse anquilosados. En la asociación de Parkinson de Granada, fundada por Modesta, bailan salsa. Ya se sabe que la enfermedad se lleva mejor con buen ritmo.