La delgada línea que separa España de Portugal es cada vez más invisible, y de un lado a otro de la frontera viajan con frecuencia los nuevos y los viejos valores de la cultura de dos países que parecían condenados, paradójicamente, a ignorarse. Pero ésa es ya una vieja historia.
El cuadro El barbero del Papa, de Velázquez, una de las escasas obras del pintor en manos privadas, ha sido comprado por el Estado en el mercado internacional por 23 millones de euros y será depositado en el Museo del Prado.
La historia cultural está ligada a la historia de la política. Es una de las "grandes transformaciones" en la historiografía europea y española de los últimos 20 años, según los hispanistas Jonathan Brown y John H. Elliott. Los dos historiadores presentaron ayer el volumen Un palacio para el rey.
Nuevo libro de José Luis Sampedro (Barcelona, 1917), y esta vez cargado con la dinamita del sentido común y de la ironía para denunciar el despropósito de la guerra y posguerra de Irak.
"Sin los artistas el mundo sería invivible", comenta Victoria Combalía, historiadora y crítica de arte que estos días presenta el segundo volumen de Comprender el arte moderno (Debolsillo) dedicado a los artistas, en el que recopila artículos publicados en distintos medios a lo largo de treinta años.