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El PSOE califica a Arias Cañete de enemigo en la OCM del aceite

Ginés Donaire

El PSOE ha pedido la comparecencia en el Congreso del ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, para que explique la posición del Gobierno español en la reforma de la Organización Común de Mercados (OCM) del aceite de oliva.

El diputado socialista José Pliego tildó ayer a Cañete como el "mayor enemigo" para los intereses andaluces en la reforma que la Comisión Europea empezará a debatir la próxima semana.

Los socialistas reprochan al titular de Agricultura haber "colocado a España como perdedora" al manifestar que no habrá un aumento del presupuesto comunitario asignado a España y que ahora está situado en 1.005 millones de euros, lo que equivale al 42,8% del total de la ficha presupuestaria de toda la Organización Común de Mercados.

José Pliego, que trasladó en rueda de prensa la posición del PSOE andaluz sobre este tema, considera que España produce el 47,8% del aceite comunitario, según los datos reales del periodo transitorio del último quinquenio. Por tanto, entiende que hay un desfase de cinco puntos entre lo producido y las ayudas recibidas, un déficit que cifró en 120 millones de euros.

En todo caso, el PSOE se pide al Ministerio que, si no se modifican los cupos por países, tampoco se alteren los repartos a las distintas regiones españolas, pues recordó que Andalucía genera el 85% de toda la producción nacional. Por ello, Pliego reclamó al Gobierno central un "trato preferencial" para Andalucía en las negociaciones de la Organización Común de Mercados.

Ayudas

Los socialistas se han desmarcado definitivamente de las ayudas a la producción, por entender que se "condena a desaparecer" al 26% de las explotaciones olivareras andaluzas, las de baja productividad, con menos de 1.500 kilos por hectárea. Pliego puso como ejemplo que, en la actualidad, el 2,4% de las explotaciones de la comunidad supone el 30% de la superficie de olivar en Andalucía, que perciben el 34% del total de las ayudas, unos 240 millones de euros.

La propuesta que los socialitas van a elevar al Ministerio tiene cinco ejes centrales: ayudas para el mantenimiento de la actividad olivarera; una ayuda multifuncional para el olivar tradicional de escasa rentabilidad, que estaría en torno a 300 euros por hectárea, en concepto de "discriminación positiva"; ayudas agroambientales para los olivares en riesgo de abandono (los situados en pendientes muy acusadas y los que produzcan menos de 500 kilos por hectárea); fondos para impulsar la calidad y el consumo, de los que la mitad serían aportados por el sector olivarero; y, finalmente, mejorar el actual sistema de almacenamiento privado con la adecuación a los precios de mercado.

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