Lula denuncia el proteccionismo que ejercen los países ricos

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, denunció ayer ante un aforo completo de empresarios, banqueros y ministros que "los países ricos continúan predicando el libre comercio y practicando el proteccionismo", en referencia a las barreras que aplican Estados Unidos, Europa y Japón a los productos que exportan los países en vía de desarrollo, entre ellos Brasil. "No tiene sentido invertir si cuando vas a exportar te enfrentas con enormes barreras", señaló.

Lula viajó ayer a Berlín, donde se entrevistará con Gerhard Schröder, y más tarde volará a París para reunirse con Jacques Chirac. El sábado por la noche, en una cena con otros cinco presidentes latinoamericanos, el primer mandatario de Brasil, con sólo 25 días en el ejercicio de su presidencia, concitó un gran apoyo de sus colegas, quienes han aumentado sus expectativas en un fortalecimiento regional ante la crisis económica y el proteccionismo de los grandes países industrializados. Lula recordó que "Brasil trabaja para reducir las desigualdades económicas y sociales, profundizar la democracia política, garantizar las libertades públicas y promover activamente los derechos humanos".

Su discurso era esperado con gran expectación. Entre los presentes había muchos bancos de inversión que apostaron el pasado verano contra la moneda brasileña, el real, forzando una depreciación artificial de la misma por la presunta incertidumbre que causaba la candidatura del antiguo sindicalista a la presidencia. Aunque después de la victoria de Lula la presión sobre el real se mantuvo, sólo remitió cuando el presidente brasileño anunció su nuevo equipo, entre los que destacaba el presidente del Banco Central de Brasil, Henrique Meirelles, procedente de la entidad bancaria norteamericana FleetBoston.

Negociadores duros

"Queremos un libre comercio, pero un libre comercio que se caracterice por la reciprocidad. De nada valdrá el esfuerzo exportador que hagamos si los países ricos continúan a predicar el libre comercio y practican el proteccionismo", dijo Lula. "Si los países ricos son negociadores duros, tampoco nosotros podemos hacer concesiones. No podemos tener libre comercio sólo para los países en vía de desarrollo. No tiene sentido invertir si cuando vas a exportar te enfrentas con enormes barreras", subrayó.

Poco antes de que hablara Lula, el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, había explicado a la audiencia que, según el Banco Mundial, el comercio libre de todos los bienes y servicios, incluyendo la agricultura, aumentaría los ingresos mundiales en 830.000 millones de dólares si se eliminan los subsidios. Un 65% de esa cantidad ingresaría en los países en desarrollo.

La noche del sábado, en la cena con los presidentes latinoamericanos, Lula informó de que, antes de viajar a Europa, el Banco Central de Brasil había aumentado sus tipos de interés para frenar las tendencias inflacionistas en la economía brasileña. "Fui al Foro Social Mundial el día que se conocía la noticia y expliqué a decenas de miles de personas que había sido necesario aumentar los tipos de interés. Me aplaudieron. Dije que venía al Foro Económico Mundial de Davos para propugnar un diálogo. También me aplaudieron", apuntó el presidente de Brasil.

Fuentes de la cancillería brasileña confirmaron ayer que Lula hará su primera visita oficial de Estado a Portugal y España el próximo mes de julio. En la cena de presidentes latinoamericanos se notó la ausencia total de representantes del Gobierno español y del Ministerio de Asuntos Exteriores.