Edward W. Said y Daniel Barenboim se dirigen a recoger su premio mientras Woody Allen y Arthur Miller, en primer término, y el resto de premiados les aplauden. / GORKA LEJARCEGI
Los premios Príncipe de Asturias llaman al diálogo y a la libertad
El príncipe Felipe y la reina Sofía salieron a las 17.57 del hotel Reconquista. Pocos minutos más tarde empezaba, en el teatro Campoamor, la entrega de la 22ª edición de los Premios Príncipe de Asturias. Oviedo era desde mucho antes una fiesta. Con el telón de fondo de la música de Haendel, los galardonados fueron ocupando sus respectivos lugares. Woody Allen, que cerró las intervenciones de los galardonados, improvisó.