Los ahorradores argentinos recuperarán su dinero en pesos y no en dólares

Unos dos millones de ciudadanos argentinos, ahorradores, titulares de empresas o de comercios que depositaron 46.454 millones de dólares en los bancos, se enteraron oficialmente ayer de lo que tanto temían: la devolución de su dinero será en pesos y a plazos, porque los dólares entregados no están ya en el sistema financiero. El presidente Eduardo Duhalde, advertido de la realidad por el ministro de Economía, admitió al fin que no podrá cumplir la promesa que hizo cuando leyó su discurso de investidura ante el parlamento, la de devolver las imposiciones en la moneda original.

En rueda de prensa con los directores de agencias de noticias de Argentina, y ante una pregunta sobre si creía que iba a poder cumplir con su palabra, el jefe del Estado contestó: 'Creo que lo vamos a hacer manteniendo el valor adquisitivo ése, ya no en el billete, que no está... Lo que sí hay que mantener es el valor adquisitivo del dinero que la gente puso'. Poco más tarde, en una entrevista que concedió al periódico La Nación, el ministro de Economía, Jorge Remes Lenicov, fue aún más claro y directo: 'Tenemos que desnudar varias falacias a las que no estábamos acostumbrando. Una es vivir de prestado, la otra es haber depositado pesos y creer que son dólares. Vamos hacia una pesificación de la economía, no a una dolarización'.

Desde el pasado miércoles, los 500 dólares que los clientes están autorizados a retirar de sus cuentas de ahorros en dólares se entregan en pesos a la paridad oficial, fijada en 1,40 pesos por dólar, es decir 700 pesos. Si alguien quisiera recuperar dólares en billetes debería comprarlos ahora en el mercado libre y conseguiría a la cotización actual unos 350. El viceministro de Economía, Jorge Todesca, reconoció que 'no hubiera escrito el párrafo del discurso' en el que Duhalde dijo que los depósitos se devolverían en la moneda original 'porque ese era un compromiso sobre obligaciones de otros, sobre obligaciones de los bancos'.

El secretario general de la presidencia, Aníbal Fernández, dijo que 'entre marzo y diciembre del año pasado se deben haber fugado unos 24.000 millones de dólares del país'. El retiro masivo de depósitos en 2001 se estima en un 20%, la mayoría en los últimos tres meses del año. Todos los funcionarios coinciden en que el corralito financiero que redujo el retiro de los depósitos casi al punto de congelación, no será levantado 'hasta que se recupere la confianza'.

Hasta el dinero del propio ministro Remes Lenicov quedó atrapado dentro del cerco de alambre de espinos que levantó el ex ministro Domingo Cavallo a comienzos del pasado mes de diciembre por un plazo que según se anunció entonces sería de '90 días'. Según Remes Lenicov, 'todos sabemos que no hay magia, que esto no se arregla de hoy para mañana, así como nosotros necesitamos unos días para presentar en números lo que tenemos en la cabeza, que es un plan consistente, hacen falta dos o tres años para que la economía argentina comience a funcionar normalmente, abierta al mundo, con libre mercado, sin monopolios, sin restricciones'.

El Ejecutivo enviará esta semana al Congreso el proyecto de Ley de Presupuesto del que participaron legisladores de la oposición y en el que se espera reducir el déficit superior a 11.000 millones de pesos a 2.700 millones. La inflación prevista es del 11% y la caída del producto bruto interno se estima en un 2.6%. Se destinan mil millones de pesos como fondos del programa de subsidio a jefes de hogar desocupados y otros 350 millones para el Plan Alimentario, pero se mantienen las rebajas del 13% en los salarios de los empleados públicos y de los jubilados que ganan más de 500 pesos por mes.

Aun cuando Argentina anunció formalmente la suspensión de los pagos de su deuda pública, estimada en 140.000 millones de dólares, en el proyecto de Ley de Presupuesto se afectan 3.767 millones de dólares a pagar intereses al Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco Mundial, y a los bancos privados, compañías de seguros y Fondos de Pensión por los préstamos garantizados con la recaudación de impuestos durante la fase local del canje de bonos de la deuda que concluyó el pasado noviembre.

El ministro Remes Lenicov tiene previsto viajar a Washington 'a fines de mes o comienzos de febrero' con el presupuesto aprobado. En el transcurso de las entrevistas con funcionarios del Tesoro de Estados Unidos y el directorio del Fondo Monetario Internacional se presentará un programa económico que se considera 'serio y consistente'. Para sostenerlo, Argentina necesita una asistencia financiera calculada en 30.000 millones de dólares de los que aspira a conseguir 15.000 millones en forma 'más o menos inmediata'.