EE UU pide a Argentina que se ajuste a los criterios del Fondo Monetario

La Casa Blanca quiere que el Fondo Monetario Internacional (FMI) intervenga en la crisis argentina. El portavoz del presidente George W. Bush, Ari Fleischer, comentó ayer que 'es importante para Argentina trabajar sobre políticas sanas con el FMI', y añadió que este país 'tiene una democracia fuerte y el presidente confía en la solidez de las instituciones argentinas'. Bush, el presidente mexicano, Vicente Fox, y el primer ministro canadiense, Jean Chrétien, hicieron ayer público un comunicado conjunto sobre la crisis, en el que reiteran su confianza en el país suramericano.

La declaración dice: 'Argentina es nuestro vecino y amigo y hemos sido testigos de los recientes acontecimientos con preocupación. Confiamos en que todos los argentinos puedan unirse para hallar una solución que conduzca al país de vuelta a un sostenido crecimiento y prosperidad. Aplaudimos el gran esfuerzo desplegado por las instituciones de Argentina a lo largo de este periodo, y reiteramos nuestra confianza en la permanencia del país como una de las grandes democracias del Hemisferio Occidental'.

Argentina es el segundo mayor socio comercial de Brasil después de EE UU. La Casa Blanca descartó -antes de aludir al FMI- las sugerencias de que debía acudir al rescate de Argentina para superar la crisis. 'Los argentinos están trabajando sobre opciones muy difíciles que un Estado soberano debe examinar para sanear y poner en pie sus finanzas', dijo el secretario del Tesoro estadounidense, Paul O'Neill, quien añadió que esas iniciativas 'deben proceder de los líderes del país, ya que no se trata de algo que se pueda imponer desde fuera. Para O'Neill, sin embargo, está 'bastante claro' que Argentina no podrá hacer frente a su deuda exterior de 132.000 millones de dólares.

México, por su parte, hizo también por separado un llamamiento a la comunidad internacional para ayudar a Argentina a superar la crisis y expresó su solidaridad con el pueblo argentino. En un comunicado oficial, el Gobierno mexicano 'declara el respaldo inequívoco al orden constitucional de la República argentina y hace un reconocimiento respetuoso a la fortaleza de las instituciones de ese país' y ' un llamamiento a la comunidad internacional para apoyar los esfuerzos del pueblo argentino con el fin de superar la grave situación por la que atraviesa y superar la senda del desarrollo y la confianza, con base en estructuras institucionales', agregó. El comunicado expresó la 'decidida solidaridad' tanto de los mexicanos como del Gabinete presidido por el presidente Vicente Fox para con el pueblo argentino y recordó que México ha tenido que enfrentar también en el pasado 'severos programas de austeridad para revertir crisis económicas'.

El presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, también confiaba en que los argentinos hallarán una pronta solución a la crisis. Los sólidos fundamentos de la economía brasileña permitieron al mercado reaccionar con estabilidad, dijo el jefe del Departamento Económico del Banco Central, Altamir Lopes. Los impactos iniciales del agravamiento de la crisis sobre la economía brasileña fueron 'muy inferiores' a lo esperado, afirmó Lopes al referirse al comportamiento del mercado brasileño en los dos últimos días. La Bolsa de Valores de São Paulo abrió ayer, un día después de la renuncia de De la Rúa, con una fuerte tendencia alcista, en tanto que el dólar se mantuvo estable.

No obstante, la crisis argentina puede dejar sin empleo a 60.000 brasileños el próximo año, según cálculos de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil. El mismo número de trabajadores perdieron su empleo este año por la caída de las exportaciones a Argentina, dijo el director de la mencionada asociación, José Augusto de Castro. 'Por cada 1.000 millones de dólares en exportaciones, las empresas brasileñas generan 60.000 nuevos empleos. Las ventas a Argentina ya cayeron en 1.000 millones de dólares este año y el próximo será peor', dijo.