Cuevas se desmarca del 'déficit cero' y pide al Gobierno que rebaje las cotizaciones sociales

A la estrategia del Gobierno para atar la estabilidad presupuestaria y fiscal le ha salido una nueva voz crítica: la del presidente de la CEOE, José María Cuevas. Pese a compartir el objetivo final 'a ultranza', Cuevas se desmarcó del cómo, que pasa por el atrincheramiento en el déficit cero pese a la actual incertidumbre económica. 'La estabilidad se debe conseguir, pero con un método correcto', advirtió el patrón de los empresarios, quien cuestionó si es conveniente lograr un amplio superávit de la Seguridad Social o aprovecharlo para rebajar 'cuanto se pueda' las cotizaciones sociales.

Cuevas dejó caer veladamente sus críticas de buena mañana en la intervención con la que abrió -ante los oídos del vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato- la asamblea general de la patronal CEOE celebrada ayer, con el euro como tema central, y se acabó de soltar tras el discurso con el que cerró la sesión el presidente José María Aznar.

'Cabe preguntarse si en el contexto actual es más conveniente alcanzar un amplio superávit de la Seguridad Social o aprovechar el margen de su situación económica y financiera para reducir cuanto se pueda las cotizaciones a la misma, como una forma de contribuir mejor al sostenimietno del empleo', martilleó Cuevas.

Unas horas más tarde, el presidente de la patronal contradijo, por el 'método', la obsesión del Gobierno en torno a la estabilidad: 'El método correcto no es el de aplicar de una manera tan firme, dura e inexplicable los superávit de una cuenta que es la Seguridad Social al déficit de otra cuenta. Eso se debe corregir'. Cuevas se refería al hecho de que el Gobierno de Aznar puede alardear de equilibrio presupuestario en las cuentas públicas presentadas para 2002 gracias a este superávit.

Ante la crisis económica en ciernes, a Cuevas, igualmente crítico contra 'los falsos triunfalismos', también le parecen 'insuficientes' las medidas económicas que el Gobierno ha incorporado al Proyecto de Ley de Acompañamiento de los presupuestos. El máximo representante de la CEOE exigió una disminución de la presión fiscal sobre las actividades empresariales.

La perspectiva de una rebaja fiscal sí fue evocada, y en el mismo foro empresarial, por el presidente del Gobierno, pero la nueva reforma del IRPF a la que éste dijo que piensa proceder el año próximo -y de la que no dio detalles- tendrá el propósito central de apoyar a la familia. Aznar también avanzó que la semana próxima será aprobado un Plan Integral de Apoyo a la Familia, de tres años de duración, que incluirá actuaciones en viviendas, guarderías y acceso a la cultura y las telecomunciaciones.

Pacto de EstabilidadEn un paisaje económico sombrío, en el que los Gobiernos europeos afrontan presiones para reinterpretar el draconiano Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que les obliga a mantener a raya el déficit, tanto Aznar como su vicepresidente económico, Rodrigo Rato, insistieron en que la 'receta' es no moverse un milímetro en la senda de la estabilidad. 'Ustedes sabrían que la crisis de 2002 no ha hecho más que empezar', atacó el ministro de Economía las propuestas de aumentar el gasto público.

Rato aseguró que España dispone de un 'amplio' margen de maniobra para encarar un escenario de incertidumbre que se resistió a tildar de pesimista. Igual que había hecho el día anterior el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, también concedió que la previsión de crecimiento para 2002 sobre la que se sustentan los presupuestos (un 2,9%) se sitúa en una banda más alta, pero también apuntó que la desaceleración en España no es tan intensa como en sus vecinos europeos.