Los agricultores exigen a Aznar que no ceda ante Rabat en materia hortofrutícola

Los agricultores exigieron ayer a la Comisión Europea y al presidente del Gobierno español, José María Aznar, que, tras el fracaso del acuerdo pesquero, no cedan también ante las peticiones de Marruecos en materia hortofrutícola, que consideran perjudiciales para el sector del tomate. Bruselas intentará solucionar las divergencias de interpretación con Rabat sobre las concesiones otorgadas por la Unión Europea (UE) a sus exportaciones de tomate en junio, durante las negociaciones para revisar el acuerdo agrícola con ese país (véase EL PAÍS de ayer).

Marruecos quiere autorización para exportar tomates a la UE casi sin límites, a cambio de incrementar la importación de carne, leche y cereales procedentes de los países comunitarios. Esta petición perjudicaría principalmente a España, uno de los mayores productores de tomate de Europa. Asociaciones de agricultores criticaron esta posibilidad y advirtieron de que llevará al sector a la ruina. 'La UE no debe ceder ante las propuestas de Marruecos', señaló el presidente de Asaja, Pedro Barato. 'El Gobierno no tiene que esconderse', indicó Fernando Moraleda, secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores. Moraleda urgió al Ejecutivo a que interceda para defender los intereses del sector.