ETA abrió en diciembre la posibilidad de actuar contra la Ertzaintza

'Los hechos se imponen sobre las consideraciones políticas: el atentado contra Iñaki Totorika deja claro que era un atentado preparado contra una patrulla de la Ertzaintza. Ese es el dato objetivo con el que hay que trabajar'. Esta es la declaración pública que hizo ayer el consejero vasco de Interior, Javier Balza, conociendo el último boletín interno etarra. En el documento, fechado en diciembre pasado, ETA retoma su lenguaje beligerante contra la policía vasca, que hasta entonces había estado en 'observación', según las declaraciones de varios activistas arrestados. Pese a todo, los comandos seguían recopilando información sobre agentes antiterroristas o mandos policiales vascos.

La decisión de 'dar leña' a la Ertzaintza ya está tomada, según aseguran fuentes oficiales vascas. El problema ahora para los analistas es conocer hasta dónde puede llegar ETA en su escalada y de qué manera 'va a administrar' sus atentados. En definitiva, los especialistas de Interior estudian aún si las acciones terroristas van a ser selectivas contra la cúpula de Interior, mandos policiales, o se ha dado el paso siguiente, como el atentado contra Totorika parece indicar. En el citado boletín se hace también un análisis muy crítico de la posición del PNV y se le vuelve a calificar de 'traidor'.

Persuadido de lo que le viene encima, Balza ha intentado trasladar a los mandos y a los sindicatos policiales, con los que se reunió el martes en Vitoria, la idea de que 'hay que aunar esfuerzos', que 'con este tema no se juega' y que hay que 'hacer una piña'.

Por contra, el sindicato mayoritario Erne acusó a Balza de no haber presentado 'ningún análisis coherente' en el encuentro. Erne dice que la Ertzaintza es la policía que 'más directamente' se va a enfrentar al terrorismo, pero 'Balza no extrae ninguna conclusión'.

Con el último boletín incautado a la banda, ETA recupera un lenguaje que empezó a emplear a mediados de los 90. En julio de 1995, en un comunicado durísimo, ETA amenazó a la policía autónoma vasca, entonces dirigida por Juan María Atutxa. Se le indicaba que no iba a poder 'eludir la responsabilidad que había adquirido ante Euskal Herria ni aunque pidan perdón de rodillas'. Entonces la tildó de 'colaboracionista con el Estado español' y se la pintaba como un cuerpo dispuesto a 'tomar el testigo de la Guardia Civil'.

Medio año antes, la amenaza genérica se había traslado a todos y cada uno de los agentes al asegurar que 'todos los ertzainas ya saben en qué están y dónde están; y desde el primero al último forman parte de un ejército español que ayuda a oprimir a este pueblo', acusación que retoman en el nuevo documento interno.

Eran años en los que los activistas de la violencia callejera se empleaban a fondo en el lanzamiento de bombas incendiarias. Una lluvia de ellas alcanzó en Renteria, el 24 de marzo de 1995, a una furgoneta. Los cinco agentes resultaron heridos, y uno de ellos, Jon Ruiz Sagarna, sufrió quemaduras que lo pusieron al borde de la muerte.

ETA sólo ha suspendido oficialmentelas 'acciones selectivas' contra la Ertzaintza desde el 18 de octubre de 1997 hasta el 22 de junio de 1998. La operación de la Ertzaintza en Gernika en junio de 1998, en la murió la jefa del comando Vizcaya, Inazi Zeberio, fue la explicación de ETA para acabar con la tregua.