La defensa de Pinochet apela el fallo que le privó del fuero parlamentario por la 'caravana de la muerte'

Planteando la absoluta inocencia de su cliente, la defensa del exdictador Augusto Pinochet presentó ayer un recurso ante la Corte Suprema contra el fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago, que por 13 votos a nueve le retiró su inmunidad parlamentaria al concluir que existían sospechas fundadas de su participación en los secuestros de 19 prisioneros políticos perpetrados por la caravana de la muerte en octubre de 1973. El abogado Gustavo Collao, en representación del equipo jurídico que defiende a Pinochet, entregó ayer su recurso de apelación ante el Tribunal Superior. Sostuvo que no hay antecedente alguno que involucre a su cliente en los delitos de que se le acusa y calificó el fallo de la Corte de Apelaciones que lo desaforó como "abusivo y agraviante en la persona del expresidente de la República".

"No existe ningún antecedente, ni indicio, ni sospechas de participación alguna [de Pinochet] en los delitos que se le imputan", afirmó Collao. Explicó que en el escrito piden a la Corte Suprema enmendar el agravio cometido.

La apelación, basada en los argumentos utilizados por los nueve jueces que votaron rechazar el desafuero, insiste en la necesidad de que al ex general se le practiquen exámenes médicos, pues su estado de salud no permite que exista un debido proceso.

Después de la apelación, la Corte Suprema anunciará la vista de la causa, fijando una fecha para que los siete abogados querellantes y el Consejo de Defensa del Estado, por la parte acusadora, y la defensa realicen sus alegatos ante los 20 magistrados del Tribunal Superior.

Una relatora de esta Corte se encuentra dedicada sólo a leer el expediente y el fallo del tribunal de alzada para informar oralmente a los jueces antes de los alegatos.

El presidente de la Corte Suprema estima que el fallo estaría terminado en junio, aunque los querellantes creen que el proceso se extenderá hasta julio.

Por otra parte, el abogado Francisco Bravo presentó ayer dos nuevas querellas contra Pinochet, una por la detención y ejecución en 1973 de Gonzalo Jorquera, un escolta del expresidente Salvador Allende, y otra por la detención y desaparición a manos de la DINA de Luis Valenzuela en 1974. A su vez, el abogado Hugo Gutiérrez presentó otra querella, la número 113 contra el general, por la desaparición de Francisco Betancourt, detenido por militares en 1973.