Nuevo retraso del fallo sobre el desafuero del ex dictador Pinochet

El próximo lunes se conocerá finalmente el texto del fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago que despojó de su fuero parlamentario al ex dictador Augusto Pinochet por una mayoría de 13 votos contra nueve el pasado 23 de mayo. Aunque todos los sectores han pedido a los jueces que entreguen cuanto antes su resolución -y éstos también quieren darla a conocer para dejar de estar en el centro de la atención pública-, el proceso de redacción del que se considera el fallo más importante de la historia judicial chilena habrá tardado en total 11 días en ser entregado. Según trascendió en fuentes de los tribunales, la redacción del documento se ha retrasado porque dos de los magistrados pidieron realizar algunas precisiones sobre la argumentación, que se prevé tendrá unos 25 folios con los fundamentos de ambas partes.

Aunque en rigor un fallo no existe hasta que su texto es redactado y firmado por todos los jueces que lo emiten, como se han encargado de recordarlo en estos días algunos parlamentarios pinochetistas, nadie cree que pueda haber algún cambio de última hora en la votación del pleno de la Corte de Apelaciones, pues incluso ya se conoce cómo se ha pronunciado cada magistrado y, por tanto, si alguien cambia de posición se sabría quién fue.

Las presiones de la derecha apuntan ahora contra miembros de la Corte Suprema, a los que han acusado de irregularidades en los últimos días. Abogados defensores de los derechos humanos denunciaron que detrás de estas críticas a los que decidirán la suerte de Pinochet hay en marcha una operación destinada a desacreditar a la justicia en Chile.

Sorprendentemente, los magistrados del Tribunal Superior se reunieron ayer para analizar el tema. Desde Berlín, donde participa en la cumbre progresista, el presidente Ricardo Lagos afirmó que Chile "está tranquilo" y las "instituciones funcionan" a la espera de esta resolución. Reiteró la posición del Gobierno en el sentido de que en Chile se respeta la autonomía de los tribunales y recordó que el proceso es en realidad "un antejuicio", que además es apelable ante la Corte Suprema.

Guzmán continúa

Después de que el fallo sea conocido, la defensa tendrá un plazo de cinco días para apelar el desafuero ante el Tribunal Superior. Entretanto, el juez Juan Guzmán, que investiga las 110 querellas criminales presentadas hasta ahora contra Pinochet -un número récord en el país contra una sola persona-, ha proseguido impertérrito su labor. Guzmán supo del día del fallo mientras supervisaba labores de excavación en busca de restos de personas detenidas desaparecidas y prosiguió su trabajo sin emitir comentarios. Ayer interrogó al ex subsecretario de Relaciones Exteriores de la dictadura, el general retirado Ernesto Videla, y anteayer, al ex jefe jurídico del Ejército, el general Fernando Torres Silva, junto con otros dos coroneles en servicio activo y un brigadier y un general también en retiro.

Guzmán investiga una posible obstrucción a la justicia en el caso caravana de la muerte, por el que los querellantes pidieron el desafuero de Pinochet. Quienes esperan más impacientes el fallo son los ex altos mandos militares. El Cuerpo de Generales en Retiro del Ejército se reunió en la víspera para criticar a un país "desagradecido", que no reconoce la "gesta liberadora" de Pinochet y los suyos con el golpe de Estado de 1973, que derrocó a Salvador Allende. Recordaron que Pinochet está "injustamente procesado por el solo delito de haber salvado a Chile del caos marxista".