Osalan detecta un fraude a la Seguridad Social en falsos accidentes laborales. Osalan denunciará a las empresas que han dado parte de falsos accidentes laborales

El plan del Instituto vasco de Salud Laboral, Osalan, para controlar a las 1.669 empresas vascas que acumulan un alto índice de siniestralidad (el 51% de los accidentes laborales registrados el año pasado) ha dado sus primeros frutos antes incluso de que empiecen las inspecciones. Osalan ha descubierto que, al menos, cuatro empresas hicieron pasar enfermedades comunes de sus trabajadores, como lumbalgias y lesiones esquiando, por accidentes laborales para ahorrarse el dinero que cuestan las bajas por enfermedad y beneficiarse de la amplia cobertura que la Seguridad Social ofrece a los accidentados en el trabajo. Osalan comunicará a la Autoridad laboral el fraude cometido por las empresas que apuntaron como accidentes laborales enfermedades de sus trabajadores, como ayer adelantó El Diario Vasco. En caso de accidente laboral, la Seguridad Social, a través de las mutuas de accidentes, paga el 75% e incluso hasta el 100% del salario del trabajador mientras está de baja. No ocurre así cuando la incapacidad temporal está motivada por enfermedades o lesiones comunes, lo que obliga entonces al empresario a pagar casi la mitad del salario del trabajador.

Curiosamente, el instituto vasco de salud laboral ha conocido el fraude de boca de los propios empresarios. Osalan envió en abril cartas a las 1.669 empresas que registraron el año pasado un alto índice de siniestralidad anunciándoles una inspección. La misiva alarmó a una quincena de empresarios que llamaron al propio director de Osalan, Juan Carlos Coto, y en cuatro de los casos confesaron el fraude; que en realidad no habían tenido tantos accidentes laborales y que habían disfrazado algunas enfermedades, como lumbalgias y accidentes de fin de semana de sus operarios jugando a futbito o esquiando, como siniestros laborales.

Osalan, que no tiene capacidad sancionadora, actuará contra estas cuatro primeras empresas en las que se ha descubierto el engaño comunicándolo a la Autoridad Laboral para que actúe y además realizará un seguimiento especial con ellas. El año pasado, aumentaron los accidentes laborales leves y la siniestralidad se cobró la vida de 159 trabajadores vascos y navarros.