15 guerrilleros colombianos y un soldado mueren en combates

Mientras se siguen escuchando voces que claman flexibilidad tanto al Gobierno como a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para sacar del limbo al proceso de paz, la guerrilla y los paramilitares continúan sus acciones de guerra. En Currulao, una pequeña población del Urabá antioqueño, combates entre las FARC y comandos antiguerrilla dejaron, según el comandante de las fuerzas militares, el general Fernando Tapias, 15 guerrilleros y un soldado muertos.En aldeas de Tulua, en el valle del Cauca, se inició ayer, martes, la romería de hombres, mujeres y niños que huyen del horror que les causa la presencia de las milicias paramilitares de Autodefensa de Córdoba y Urabá. Las AUCC llegaron el lunes para quedarse, y a plena luz del día, ante la horrorizada población y ante las cámaras de televisión, se pasearon armadas hasta los dientes, con pasamontañas negros cubriéndoles el rostro.

Anunciaron que matarán a todos los "colaboradores" de la guerrilla. Y también que están dispuestos a colaborar con el rescate de las 45 personas secuestradas hace ya dos meses en una iglesia de Cali -capital del valle del Cauca- por el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

En medio de este caos, tres generales -dos activos y uno en retiro- deberán rendir testimonio en el caso del coronel Jorge Plazas, Don Diego, director de los servicios secretos de la Decimotercera Brigada, hoy en prisión acusado de armar una banda de secuestradores implicada en el asesinato de un empresario judío. Benjamín Khoudart fue secuestrado y asesinado a pesar de que se pagó por su libertad un importante rescate.