_
_
_
_

Osakidetza sólo realiza el 15% de los abortos legales del País Vasco Desviarlos a centros privados le cuesta 40.000 pesetas por operación

Los centros públicos adscritos a Osakidetza sólo realizan alrededor de 180 (el 15%) de los cerca de 1.200 abortos legales que se efectúan en la Comunidad Autónoma Vasca cada año. La objeción de conciencia de los médicos, un factor que planea sobre este tema y afecta en mayor o menor medida a todos los hospitales públicos, obliga al Servicio Vasco de Salud a establecer convenios con centros privados y abonar las 40.000 pesetas de media que cuesta cada operación fuera de la red pública. El panorama ha mejorado en los últimos tiempos. En los años siguientes a la promulgación la Ley del aborto en 1985, ni Álava ni Guipúzcoa contaban con especialistas de Osakidetza dispuestos a efectuar interrupciones voluntarias del embarazo (IVE). En la actualidad, todos los centros cuentan con ginecólogos disponibles para realizar esta operación, a excepción del hospital de Santiago, en Vitoria, y de la objeción parcial que adopta el equipo de especialistas de Cruces, en Vizcaya, que no asumen el daño psíquico para la embarazada en el tercer supuesto. Otros médicos, según señala un responsable sanitario, aún no teniendo ningún problema, se acogen a la claúsula de conciencia para no sobrecargarse del trabajo desviado por otros compañeros que sí la profesan realmente.

Más información
El cajón de sastre

Sólo 41 alavesas recurrieron al aborto legal en 1997, frente a 568 vizcaínas y 621 guipuzcoanas La objeción de conciencia médica provoca que la mayor parte se desvíen a hospitales privados

Las cifras oficiales revelan que en los últimos ocho años se ha reducido el número de abortos legales realizados en el País Vasco: en 1990 eran 1.485, mientras en 1997 fueron 1.230. Sin embargo, los centros públicos aumentaron su protagonismo en la operación y han pasado de realizar del 10,5% de las intervenciones al 15% actual. Por territorios, los datos del pasado ejercicio revelan ciertos desequilibrios, ya que fueron 41 alavesas las recurrieron al aborto legal, frente a las 568 vizcainas y 621 guipuzcoanas que lo hicieron. La mitad de ella contaban con edades comprendidas entre los 20 y los 29 años, y únicamente se sometió a esta operación una mujer menor de 15 años y dos embarazadas mayores de 44 años. El caso más destacado es el que se refiere a Álava. Desde la aprobación de la ley de 1985, que contempla la despenalizción del aborto en tres supuestos (embarazo por violación, malformación del feto, o peligro para la vida de la madre, así como problemas físicos o psíquicos derivados) el hospital de Santiago Apóstol no ha efectuado ninguna intervención de estas características antes de las 22 semanas prescritas. El Hospital Txagorritxu ha aceptado la realización de abortos desde hace cinco años, aunque con matices. José Luis de Pablo, director médico, destaca que en los últimos tres años se han realizado una media de ocho intervenciones anuales. En este centro existen médicos que objetan de manera global, "y otros que lo hacen en caso de que el aborto sea compatible con la vida, como en el caso del síndrome de Down o de malformaciones que se pueden corregir", señala De Pablo. La psicóloga del centro precisa que la inmensa mayoría de los casos "no llegan al hospital ya que se detectan en los centros de planificación y se desvían hacia consultas privadas, sobre todo cuando existe VIH y los de problemas para la salud psíquica de la madre. El hospital de referencia en estos casos es el centro Euskalduna, de Bilbao, y consultas particulares de Vitoria y de otras provincias. En Guipúzcoa, el hospital de referencia es Aránzazu, donde, en una plantilla de 30 ginecólogos, sólo existe un objetor. Durante 1997 se efectuaron un total de 36 interrupciones en este centro donostiarra. En la provincia existen dos hospitales privados concertados que realizan este tipo de intervenciones, y centros públicos situados en Zumárraga, Mendaro e Irún.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_