_
_
_
_
_

La industria reclama nuevos métodos contra el fraude en el aceite de oliva

La aparición en el mercado español de aceite de oliva a más bajo precio del considerado normal para cubrir los costes de producción ha alertado a los industriales envasadores. Según sospechan, el producto se está vendiendo mezclado con otras semillas, más concretamente, con aceite de avellana. Por este motivo, los industriales del sector han dirigido a la Unión Europea la petición de que utilice los últimos avances tecnólogicos para detectar este tipo de fraude al consumidor.

Industriales envasadores españoles han mostrado su preocupación ante la existencia en el mercado nacional de aceites de oliva para consumo a unos precios por debajo de los que se consideran costes normales de producción. Frente a un precio mínimo para el denominado aceite de oliva puro, que sería de 300 pesetas, en los últimos meses han aparecido en el mercado nacional aceites entre las 250 y las 270 pesetas por litro.La situación ha sido analizada ya en varias reuniones por la Asociación Nacional de Envasadores de Aceites Comestibles desde donde se insta a la Unión Europea a la incorporación a los reglamentos comunitarios de nuevos sistemas de análisis con el fin de descubrir mezclas de aceites de oliva con semillas ahora no detectables. En medios del sector se teme que se estén vendiendo en el mercado interior como aceites "puros" de oliva, partidas de un aceite mezclado con semillas, concretamente con aceite de avellana.

Desde las industrias envasadoras se insta igualmente a la distribución para adoptar precauciones cuando se les oferten aceites de oliva por debajo de los precios que se estiman como los costes mínimos para transformar, envasar y comercializar.

El aceite de oliva, al igual que la leche, sigue como un producto reclamo en la gran distribución desde la que se exigen bajos precios a los industriales con los consiguientes riesgos de rebajar la calidad.

España se ha manifestado históricamente en contra de la mezcla de aceite de oliva con otros de semillas por lo que supone de reducir las ventas de oliva y la posibilidad de evitar los fraudes en la composición del nuevo producto.

Las mezclas están prohibidas en España pero autorizadas en la mayor parte de los países comunitarios no productores de aceite de oliva, siempre que se haga constar en la botella. Los servicios de la Comisión, en su informe referido a 1997, destacaron la existencia de operaciones irregulares por la mezcla de aceites de oliva con cacahuete o avellana.

Actualmente, según fuentes industriales, con los métodos de análisis aprobados y admitidos por la UE, no es posible detectar la mezcla exacta de aceites de semillas con aceite de oliva cuando se halla en un porcentaje entre el 15% y el 20%.

Sin embargo, se considera que ya se han descubierto nuevos métodos analíticos según los cuales sí sería posible detectar esas actuaciones fraudulentas. Estos trabajos de investigación habrían sido realizados especialmente por el Instituto Tecnológico de Milán así como por el Instituto de la Grasa de Sevilla.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_