El MI5 británico detecta nuevos intentos de asesinar a Rushdie

Las esperanzas del escritor anglo-indio Salman Rushdie de regresar a la normalidad, tras casi ocho años de vida secreta, se han visto frustradas debido a nuevas amenazas de cumplir la sentencia de muerte dictada contra él en 1989, según los servicios secretos británicos. Rushdie, de 48 años, se vio obligado a aceptar la protección especial de la policía británica y a vivir en paradero secreto en el Reino Unido desde que el fallecido imam Jomeini le impusiera en 1989 la fatwa -sentencia de muerte- a raíz de la publicación de su novela Los versos satánicos.

, De acuerdo con una información del diario británico The Guardian, que cita fuentes del MI5 -servicios de información relacionados con la seguridad interior del Reino Unido-, la protección especial de que disfruta el escritor ha tenido que ser reforzada nuevamente al recibirse Informes que hablan de nuevos intentos de ejecutar la sentencia. La noticia se hizo pública ayer, coincidiendo con una reunión del grupo de apoyo que intenta lograr una salida a la desesperada situación del autor de El último suspiro del moro.El caso Rushdie había tenido un giro optimista a raíz del anuncio hecho a comienzos de 1995 por las autoridades de Irán de que no enviarían a ningún comando a ejecutar la sentencia de muerte contra el escritor. El cambio de actitud del Gobierno iraní estaba directamente relacionado con la oferta formulada por la Unión Europea de dar mejor trato económico a este país y estrechar los lazos diplomáticos a cambio de que Irán reconociera la posibilidad de que Rushdie resida en paz en cualquiera de los 15 países de la UE.

Sin embargo, el estancamiento de las negociaciones Irán-UE ha deslucido la perspectiva de un final inmediato del caso Rushdie. Las autoridades de Teherán insisten en que la promesa de no enviar a nadie a ejecutar la fatwa sigue en pie, pero se niegan a conmutar la sentencia. "El diálogo con Irán no ha servido para nada. Es sólo una hoja de parra para la Unión Europea", ha declarado el escritor, cuyo Comité de Defensa pidió ayer que la UE fije como límite diciembre de este año en su diálogo negociador con Irán.

La presidenta del comité, Frances D'Souza, considera que "es muy difícil promocionar el aspecto fundamental del caso. Es decir, el hecho de que no enfrentarse a él sienta un peligroso precedente porque es el primer caso en la historia en el que un Estado lanza una condena a muerte contra alguien que reside en un país diferente y que no ha cometido ningún delito".

El año pasado Rushdie había iniciado un tímido regreso a la normalidad, asistiendo incluso a algún acto de promoción de su última novela y a un par de lecturas literarias celebradas en la capital británica.