La reforma del reglamento se retrasa hasta después de la feria

El Ministerio de Justicia e Interior vuelve a incumplir sus promesas respecto a la entrada en vigor de la reforma del reglamento. Tampoco verá la luz durante la feria de San Isidro, que fue el último plazo con el que se comprometió después de no cumplir tampoco los anteriores, fijados en el mes de marzo y en la Feria de Abril. La nueva fecha es, como muy pronto, a mediados del mes de junio, aunque eso no significa que vayan a entrar en vigor todos los artículos reformados, pues quizás alguno no lo haga hasta la temporada 1996.La reunión del pasado día 24 de abril de la Comisión Consultiva Nacional Taurina, en la que Interior dio a conocer las modificaciones previstas, parecía iba a ser el último trámite antes de su envío al Consejo de Estado y al de Ministros para su entrada en vigor. Pero al no existir acuerdo total con varias Comunidades Autónomas con las competencias taurinas ya transferidas, el secretario general técnico del Ministerio, Miguel Ángel Montañés, hubo de reunirse de nuevo con responsables autonómicos taurinos para que desapareciesen totalmente ciertas desavenencias. También varios sectores interesados en la fiesta, y representados en la Comisión, aprovecharon para presentar algunas alegaciones a la reforma.

Esta reunión tuvo lugar el pasado día 5, con lo que ahora se va a convocar de nuevo a la Comisión, dentro de dos semanas, para que sus integrantes conozcan estos cambios, aunque ya no se va a dar opción a nadie de solicitar más reformas, según Montañés. Tras esta próxima reunión se enviará el texto consensuado al Consejo de Estado, para su estudio jurídico, y al de Ministros, para su aprobación y publicación en el Boletín Oficial del Estado. En estos trámites se tardará un mínimo de dos semanas, es decir, que con mucha suerte el cambio reglamentario llegará a mediados de junio. Montañés quita hierro al retraso "porque era preferible un consenso total a que cada Comunidad elaborase su propia normativa y tuviésemos 16 reglamentos distintos", afirma antes de añadir que "en cualquier caso, por la integridad del toro y la fiesta en San Isidro da igual que la feria se desarrolle con uno u otro reglamento".

El fraude del afeitado

Su conclusión es esta: "Es en el resto de las ferias españolas y festejos donde se produce en grandes cantidades el fraude del afeitado, que el reglamento del 92 no logró evitar y es el que nos ha movido a cambiarlos".

Interior incumple, además, la moción que a instancias del senador Juan Antonio Arévalo, aprobó sin ningún voto en contra la Cámara Alta el pasado mes de noviembre. En ella, que es de cumplimiento obligatorio para el Gobierno, se ordenaba al Ejecutivo que modificase varios puntos del actual reglamento de 1992, entre ellos la desaparición de los artículos 49 y 59, antes del inicio de la actual temporada.