La Caja de Navarra es la propietaria de la Biblia subastada en Christie's

La Caja de Ahorros de Navarra (CAN) es la entidad financiera que el pasado 15 de marzo se adjudicó la primera versión del Nuevo Testamento en euskera, impresa en los talleres de Pierre Hautin en 1571 y subastada en la galería Christie's de Londres.La CAN pagó 166.500 libras (casi 34 millones de pesetas) por la denominada Biblia de Leiçarraga, escrita por encargo de la reina de Navarra, Juana de Albret. El presidente del Gobierno de Navarra, Juan Cruz Alli, presidente a su vez del consejo de administración de la CAN, dio cuenta d e la operación al consejo de la entidad en su reunión ordinaria del pasado viernes, día 31 de marzo. Alli indicó a los miembros del consejo que la compra tuvo en todo momento el visto bueno de la dirección de la CAN y justificó el sigilo con el que se desarrolló toda la operación en la necesidad de mantener la discreción para alcanzar el fin propuesto, como así fue. Los miembros del consejo, representantes de los partidos políticos Unión del Pueblo Navarro, Partido Socialista de Navarra y Eusko Alkartasuna, aprobaron unánimemente la actuación de la CAN, a pesar de haber pagado un precio 16 veces más alto que el establecido en la puja de salida.

La dirección de la Caja se negó ayer a facilitar dato alguno sobre la compra, alegando que el director de la entidad, Lorenzo Riezu, se encontraba de viaje, al igual que el subdirector. Fuentes de la CAM se remitieron a una posible nota oficial que la entidad podría hacer pública en días venideros.

La Caja de Ahorros de Navarra fue la vía utilizada por la Comunidad Foral de Navarra para adquirir esta biblia que, según la hipótesis más barajada, podría ser donada a los fondos del Museo de Navarra, una vez realizada una edición facsímil de la obra.

Según la información adelantada ayer por el rotativo local Diario de Noticias, el sistema de puja fue una operación diseñada para evitar que el Gobierno vasco, máximo oponente de Navarra en la subasta, se hiciese con el ejemplar. El Ejecutivo de Vitoria pujó a través de la Fundación Sancho El Sabio.