Intelectuales piden una mayor participación de Cataluña en la construcción de España

Varios de los participantes en la Tertulia de Crisol dedicada ayer al libro Los catalanes y el poder (El País / Aguilar), que ha coordinado Xavier Vidal-Folch, coincidieron en citar a Unamuno: Cataluña tiene el deber de catalanizar a España. Con esta frase varias veces repetida se reclamó una mayor intervención de Cataluña en la construcción de España. Participaron en la tertulia el ex vicepresidente Fernando Abril Martorell, el ex ministro Ernest Lluch, el director adjunto de EL PMS Xavier Vidal-Folch y moderó el acto el director de publicaciones de PRISA, Joaquín Estefanía.

Los catalanes y el poder analiza la actitud de los ciudadanos catalanes en las tareas de gobierno de España durante el último siglo y medio y en la actualidad y lo hace desde una óptica de conciliación entre los nacionalismos español y catalán, comer señaló ayer Joaquín Estefanía. "Esto es lo que ha intentado hacer EL PAÍS durante los últimos 12 años, desde que sacó su edición catalana", afirmó. El libro, que surgió de una iniciativa del suplemento en catalán Quadern se edita simultáneamente en castellano y en catalán. La edición catalana se presentará hoy, a las 19 horas en el Cercle de Economía (Diagonal, 520) en Barcelona, con la participación del historiador Joan B. Culla, el profesor emérito Fabián Estapé, el presidente de UNICE, Carlos Ferrer Salat, y el escritor Manuel Vázquez Montalbán.La idea de fondo del libro, dijo Vidal-Folch es que "Cataluña no debe dar miedo a España, puede suscitar críticas o simpatías, pero no miedo".

'Ante la intervención de un asistente que expresó su temor sobre una posible "persecución del castellano en la enseñanza en Cataluña", Abril Martorell explicó que "la ley de normalización lingüística fue aprobada por todos los partidos de Cataluña, otra cosa es que en su ejercicio puedan cometerse algunos abusos, pero todo, eso, puede corregirse en un sistema de libertad democrática".

"Respeto y cariño"

Abril Martorell añadió: "Es importante ponerse en el lugar de los otros y comprender y querer su realidad. Para Cataluña la lengua es algo fundamental, su alma, su expresión, que hay que tratar con respeto y con cariño enorme, aunque también hay que proteger los derechos de los otros. Este libro contribuye a explicar la verdad de Cataluña a Madrid y la de Madrid a Cataluña, para que cada uno se vaya formando su propio juicio".Ernest Lluch, que reconoció que la lectura de Los catalanes y el poder le había "excitado bastante", rechazó la tesis del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, de que Cataluña es una nación sin Estado. "Es una nación con fragmentos de Estado. El Estado español se ha repartido, una parte está en Bruselas, otra en Madrid, otra en la Generalitat... Ni aunque fuésemos independientes tendríamos Estado completo, porque parte de él estaría en Bruselas". Vidal-Folch fundamentó el porqué España no debe temer a Cataluña en la experiencia de dos siglos: "Si repasamos la historia vemos que el eje de los catalanes ha sido contribuir a la política española y que ese protagonismo ha sido más in tenso en los breves periodos de democracia. Los distintos cata lanismos, más ese orados a la izquierda o a la derecha, más moderados o más radicales, han participado en los asuntos de España con un hilo conductor: modernizar la Administración, crear un Estado democrático, crear un mercado nacional y una economía de mercado, autogobierno, apertura internacional y europeísmo".

Lluch dijo sentir cierta preocupación por las '"falsas polémicas" respecto a Cataluña, porque "quiénes las provocan no participan plenamente del espíritu de la Constitución".

Todos los participantes, no obstante, coincidieron en que desde 1975, y sobre todo desde la Constitución de 1978, llamada de los catalanes, España vive, como afirmó Abril Martorell, "el periodo de construcción más profundo en su convivencia" y que la integración y participación han sido las "más inteligentes y positivas de la historia". E insistió: "Estamos transitando una de las etapas más fecundas de nuestra convivencia. Esto se está forjando y confío en que todos lo integremos en nuestro pensamiento".

Han colaborado en el libro, entre otros autores, Josep Maria Castellet, Josep Maria Ainaud de Lasarte, J. A, González Casanova, Enric Ucelay-Da Cal, Ferran Mascarell y Manuel Vázquez Montalbán.