_
_
_
_

La Casa de América arranca con un proyecto de 6.000 millones

El palacio de Linares, rehabilitado, se inaugurará el próximo día 25 de julio

Rocío García

La Casa de América, cuya sede del palacio de Linares en Madrid será inaugurada el próximo 25 de julio coincidiendo con la celebración de la II Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, arranca con un proyecto de 6.000 millones de pesetas. Este presupuesto ha sido compartido por las tres instituciones que conforman el Consorcio de la Casa de América: el Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad y el Ministerio de Asuntos Exteriores.

Más información
Un anfiteatro escamoteable

A los 3.100 millones en los que se valoró la permuta realizada en 1989 por el Ayuntamiento de Madrid al empresario Emiliano Revilla, antiguo propietario del palacio de Linares, de 1870, se han unido los 2.850 millones, presupuesto final de las obras y rehabilitación del edificio, considerado uno de los ejemplos más importantes de arquitectura palaciega del siglo XIX madrileñó. La diferencia entre el presupuesto inicial de las obras, 2.200 millones de pesetas, y el coste final ha sido cubierta por un patrocinio de 500 millones realizado por la empresa adjudicataria, Agromán, y el resto, 150 millones, han sido desembolsados de manera extraordinaria por la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Asuntos Exteriores.Respetar un edificio catalogado como histórico y adaptarlo a las necesidades administrativas y expositivas de la Casa de América ha sido el reto del proyecto de obras y rehabilitación, realizado por el arquitecto Carlos Puente, de 47 años. Puente ha tenido que echar mano. de fotografías de la época, a falta de otros documentos, para reflejar fielmente el aspecto exterior que tenía la fachada, de la que habían desaparecido por completo la balaustrada y el escudo central. Esto, unido a la idea imaginaria de lo que tuvo que ser el jardín romántico e histórico del palacio, del que no existen ni fotografías, y que fue utilizado como aparcamiento durante muchos años, ha sido la base del trabajo de Puente.

El palacio, que cuenta con un semisótano y tres plantas principales de una gran riqueza, se encontraba, según el arquitecto Carlos Puente, en un estado de decrepitud latente. A la arquitectura e interiores del palacio, obra del francés Ombreton, no le falta de nada y obedece al estilo ecléctico de finales del siglo pasado. Desde un salón chino a una galería pompeyana, pasando por el arte bizantino y las obras del renacimiento español, todos los estilos están agrupados en este palacio de la plaza de Cibeles madrileña. "Yo creo que la restauración que se ha hecho en el palacio de Linares es la más importante que se ha realizado nunca en España", señala Puente. Lámparas, tejidos, pintura, mosaicos, azulejos, mármoles, pintura y un largo etcétera han vuelto a su estado natural de hace un siglo gracias al trabajo de la restauradora María Álvarez Garcillán.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_