Ataque armado a la sede del Gobierno en Georgia
Grupos armados de la oposición, dotados de lanzagranadas y vehículos de transporte blindados, atacaron ayer el edificio de Gobierno de Georgia en la ciudad de Tiflís con el fin de derrocar al presidente de la república, Zviad Gamsajurdia. Los atacantes mantenían anoche sitiado el edificio. A lo largo del día, al menos 17 personas resultaron muertas y medio centenar heridas de consideración. Georgia es la única de las 12 repúblicas de la ex URSS que el sábado no firmó el acuerdo de constitución de la Comunidad de Estados Indepedientes (CEI). El ataque, según un portavoz de la presidencia georgiana citado por Tass, comenzó a las 11.15 (9.15, hora peninsular, española), al iniciar los grupos armados de oposición el bombardeo del edificio.
En el inmueble sitiado tienen su sede el Gobierno y el Parlamento georgianos y fuentes de la oposición afirman que fueron los grupos partidarios de Gamsajurdia los primeros en disparar, por más que el citado portavoz presidencial considerara que Georgia estaba viviendo "un golpe de Estado" encabezado por el ex primer ministro georgiano, Tengiz Sigua.Los opositores ocuparon a primeras horas de la mañana la catedral y tomaron posiciones en la avenida Rustaveli, la principal arteria de la capital georgiana, donde fueron contenidos con barricadas, hechas con camiones. En algunos momentos el tiroteo degeneró en auténtica batalla entre contendientes dotados de armas automáticas y lanzagranadas, según periodistas locales.
A las 21.30 hora local (19.30 hora peninsular española), un proyectil alcanzó la sala de prensa del edificio, desde donde emitía la televisión local. Desde ese momento las comunicaciones telefónicas con la república han quedado interrumpidas.
En una de las últimas llamadas recibidas en la sede del gobierno el representante de Georgia en Moscú, Piotr Tchiéidze, conversó con Gamsajurdia, confirmando que el presidente se encontraba refugiado en los sótanos del edificio, y que no tenía intención de dimitir. Los atacantes le habían dado garantías de que podría abandonar el país con su familia si dimitía.
La oposición acusa al ex disidente nacionalista Gamsajurdia, elegido presidente de Georgia el año pasado, de haber degenerado en dictador y de tener amordazada la prensa. El presidente georgiano impuso el estado de emergencia el 24 de septiembre pasado después de que se produjeran violentos enfrentamientos tras la detención de varios líderes de la oposición. La lucha se reprodujo los primeros días de octubre. Las reivindicaciones de los opositores eran hasta ayer la liberación de los presos políticos, la libertad de expresión y el derecho de manifestación, pero tras el inicio de los combates van más allá y pretenden simple y llanamente el derrocamiento del Gamsajurdia.
Viceministro herido
La agencia Tass, citando fuentes solventes, informó que uno de los máximos colaborador de Gainsajurdia, el diputado Avtaldil RtsJiladze, cayó en manos de los opositores y que el viceministro del Interior, Roman Gventsadze, resultó herido en la defensa del edificio del Gobierno.
Durante todo el día, la radio y la televisión georgianas repitieron un llamamiento de Ganisajurdia para que la población acudiera a defender el edificio del Gobierno. Los partidarios del presidente estaban convencidos de que detrás de la oposición seencontraba el Ejército soviético, que ellos denominan "tropas de ocupación'?, dirigiendo las operaciones y proporcionando el material bélico. Un portavoz de la guarnición de Tiffis negó que eso fuera así.
En cualquier caso, el ataque contra Gainsajurdia Íse ha producido sólo dos días después de que la comisión de derechos Humanos del Parlamento de Georgia urgiera a los soldados que se encuentran acuartelados en la república a que abandonaran el territorio georgiano y volvieran a su casa con su familia o bien se sometieran a la jurisdicción de la república, de acuerdo con una ley dictada hace dos semanas. Esa norma declaró propiedad de la república todos los bienes del Ejército soviético.
El pasado día 14, el general Yuri Grekov, vicecomandante de la región militar de la transcaucásica, dejó claro en unas declaraciones que hizo al diario del Ejército, Krasna¡a Zvezdá, que no iba a hacer caso de esa decisión georgiana. En la misma entrevista, el general aseguraba queel presidente Gainsajurdia había pedido al Ejército 1.500 rifles automáticos, además de vehículos blindados para hacer frente a la delincuencia. Al parecer, fue después de que le negaran esas armas cuando el Parlamento georgiano decidió hacerse con ellas mediante la aproción de una ley confiscatoria.
El ataque contra el edificio del Gobierno georgiano se ha producido un día después de que todas las demás repúblicas de la antigua URSS firmaran el acuerdo de constitución de la CEI en Almá Atá, donde se hizo patente el absoluto aislamiento de Georgia, rechazada explícitamente por mantener abiertos varios conflictos étnicos en su territorio.
Además de su enfrentamiento con la oposición, Gainsajurdia tiene otros dos frentes de lucha, Abjazia y Osetia del Sur, cuyas poblaciones quieren abandonar Georgia e integrarse en la federación rusa. El sábado, el Parlamento de esta última región reiteró su voluntad de unirse a Rusia y pidió ayuda a los miembrosde la CEI, a los que instó a dictar sanciones económicas contra Georgia. En su capital, Tsjilvali, los combates se reproducen intermitentemente desde hace meses y han-produdido ya 250 muertos.
La república de Georgia se encuentra en el Caúcaso en la frontera con Turquía y la mayor parte de su población es cristiana. Su territorio es de casi 70.000 kilómetros cuadrados (siete veces más pequeño que España) y está habitado por 5,5 millones de personas.
Bombardeos en Osetia
En las últimas horas, 12 casas y algunos otros edificios públicos de Tsjilvali han sido destruidos a causa de un bombardeo con misiles y artillería efectuado por unidades georgianas que tienen cercada la capital de Osetia de¡ Sur. Según la agencia Tass, que cita fuentes fiables, a lo largo del día de ayer se fueron sumando más grupos armados ge'orgianos a los atacantes. En todo momento a esas unidades les hacen frente miembros de la guardia osetia de autodefensa. El bloqueo, tanto del transporte, como de productos y energía se ha estrechado durante el fin de semana y la ayuda humanitaria que recibe la ciudad desde la región de Osetia del Norte, en Rusia, ha sido totalmente cortado. El suministro de electricidad ha sido cortado. El Parlamento osetio considera que los georgianos están sometiendo a su pueblo a un auténtico genocidio.
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