Bush quiere dar mas tiempo a la presión mundial contra Irak

El presidente norteamericano, George Bush, manifestó ayer a los líderes del Congreso que, aunque sigue sin descartar una solución militar para forzar la salida iraquí de Kuwait, por el momento tiene intención de esperar para ver si las sanciones económicas impuestas por las Naciones Unidas logran el efecto deseado. El estado de ánimo de Bush fue reflejado por los congresistas en declaraciones a la prensa en los jardines de la Casa Blanca después de su entrevista con el presidente.[Por otra parte, los encargados de la diplomacia de EE UU, James Baker, y de la URSS, Edvard Shevardnadze, se entrevistarán el próximo 9 de noviembre en una ciudad europea, no precisada, comunicó el Departamento de Estado, informa Efe].

"El presidente sigue sin excluir una acción militar, pero por el momento prefiere continuar las acciones diplomáticas que ha iniciado", afirmó el senador republicano por Maine, William Cohen. Y Pell subrayó: "El consenso general es que se debe dar más tiempo a las sanciones".

Bush y su secretario de Estado, James Baker, aprovecharon sendos discursos en California para volver a arremeter duramente contra Irak tras varios días de referencias marginales al conflicto. Bush declaró que no dudaría en ordenar a sus tropas un ataque para responder a "una provocación iraquí, y Baker advirtió a Irak que la paciencia de la comunidad internacional "tenía un límite".

La reanudación de los ataques contra Irak por parte de Bush y Baker coincidió con la aprobación por el Consejo de Seguridad de la décima resolución de condena de Irak por las Naciones Unidas.

Ésta condenó en duros términos "la opresión y los malos tratos" infligidos por los iraquíes a la población civil de Kuwait e hizo responsable económicamente a Bagdad de los daños causados por su continuada ocupación del emirato. Igualmente,- el Consejo de Seguridad amenazó a Irak con tomar "medidas adicionales punitivas" si seguía sin cumplir las, resoluciones de la ONU, que exigen la retirada incondicional de Kuwait y el restablecimiento de su legítimo Gobierno.

Preparación británica

El ministro de Exteriores del Reino Unido, Douglas Hurd, dijo ayer que su país está dispuesto a poner en práctica en breve "la opción militar" porque "no se puede esperar indefinidamente" que los iraquíes se retiren de Kuwait.

En una cena con embajadores acreditados en Londres, Hurd aseguró que sí debe utilizarse la fuerza "se hará sin la menor vacilación y así debe entenderlo Sadam Husein", informa la agencia France Presse.