Kohl: "Nuestra alianza con EE UU es vital"

El canciller alemán occidental, Helmut Kohl, declaró ayer en Washington que no desea "la desmilitarización de Alemania" y que la futura nación sea un país "no alineado". Al término de una visita relámpago a la capital norteamericana, Kohl explicó que "la alianza con EE UU continuará siendo vital para los alemanes", y que también lo será "para la Alemania del mañana". El presidente George Bush se declaró favorable a que la unificación signifique "plena soberanía y control de Alemania sobre todo su territorio, sin discriminación alguna", y que la nueva nación forme parte de la OTAN.

Bush y Kohl analizaron ayer en Washington la agenda de 1 a reunificación de Alemania y la estrategia de la OTAN ante los cambios que se están registran do en Europa. Durante tres horas, ambos líderes se reunieron en la Casa Blanca, donde también dialogaron sobre el control de armas, la reducción de tropas estadounidenses en Europa y la situación de rebelión de los repúblicas bálticas de Letonia Estonia y Lituania.Este era el tercer encuentro entre Kohl y Bush, lo que fue interpretado por el político alemán como el más claro ejemplo de la "concertación política" que existe entre ambos países en un momento de "cambio histórico", al que el canciller ale mán denominó como "la década de Europa".

Kohl, que se refirió al presidente norteamericano utilizando la frase "mi buen amigo George Bush", regresó ayer a Bonn, donde hoy participará en la firma del tratado que establece la unión monetaria y económica de las dos Alemanias, efectiva desde el próximo día 2 de junio. Durante su visita a la Casa Blanca, Kohl explicó al presidente Bush que Alemania "no quiere perder su soberanía", que él no desea la singularización, neutralización o desmilitarización de Alemania", ni que el futuro país sea una nación "no alineada".

Mantenerse en Europa

Estados Unidos debe mantener su presencia en Europa", comentó Kohl y "compartir la responsabilidad de la configuración futura del continente [europeo]". El político alemán expresó su deseo de "reforzar el perfil de la política tradicional de la alianza [germano-americana]", de que "la cooperación entre EEUU y la CEE sea más intensa, especialmente a partir del establecimiento del mercado único" y de dotar la Conferencia de Seguridad y Cooperación Europea (CSCE) "del decisivo rol para construir pacíficamente la nueva Europa". En este sentido, Kohl dejó muy claro que no hablaba de "reemplazar, sino de reforzar la Alianza Atlántica".

El desarme y el control de armamento fueron otros temas tratados durante el encuentro entre Bush y Koffi. Ambos coinciden en el "desarme en todos los campos; la limitación de fuerzas aliadas en la futura Alemania y la reducción de fuerzas convencionales en Europa", punto, este tercero, que el canciller alemán consideró "indispensable", para el éxito de las negociacions dos más cuatro. Sobre la presencia de fuerzas militares soviéticas en la futura Alemania, Koffl comentó que este es un momento "muy delicado por que todo tenemos que hacer algún esfuerzo", refiriéndose a las repúblicas bálticas -Letonia, Estonia y Lituania-.

EEUU ha respaldado el reciente llamamiento conjunto de Kohl y el presidente francés, Francois Mitterand, a los líderas lituanos para que rebajen sus peticiones de independencia con el fin de conseguir una distensión que facilite todas las conversaciones de desarme que van a tener lugar durante los próximos meses, tanto en EEUU como en Europa.

Con la visita de Kohi a Washington, considerado en EEUU como "un buen aliado" y como el eje de la reunifiación alemana, que se ha prolongado durante sólo 20 horas, concluyen las consultas y reuniones celebradas por el presidente norteamericano a lo largo de las últimas semanas con políticos occidentales con vistas a la cumbre política que celebrará con el líder soviético, Mijail Gorbachov, a finales de este mes en Washington.

Bush expresó ayer, poco después de despedir a Kohl, su "esperanza" por el éxito de la cumbre con Gorbachov, pero también expresó su preocupación, "compartida por el canciller Kohl, sobre la situación de Lituania".