EE UU, dispuesto a dar asilo político al armenio Airikian, expulsado por Moscú

PILAR BONET El disidente nacionalista armenio Paruir Airikian, de 39 años, privado de su ciudadanía soviética y expulsado de la URSS, reapareció ayer en Etiopía, donde solicitó el asilo político en Estados Unidos, y llamó por teléfono a sus familiares en Moscú. [El portavoz del departamento de Estado norteamericano, Charles Redman, confirmó ayer en Washington que es casi seguro que se otorge el asilo político solicitado por Airikian y dijo que también se estudia la concesión de la calidad de refugiados a la esposa y los hijos del disidente, informa France Prese. En una entrevista telefónica con la agencia Reuter, Airikian informó que pensaba viajar a EE UU el domingo próximo e instalarse después en Francia, para tratar de volver a su país. "Es mi patria, mi nación, es una buena lucha", dijo.]

El Presidium del Soviet Supremo de la URSS, que rechazó la secesión de Nagorno-Karabaj de Azerbalyán, anunció el pasado 20 de julio la expulsión de Alrikian, que fue aparentemente ejecutada al día siguiente, mientras en Moscú se le creía en la cárcel, donde permanecía desde el 24 de marzo pasado, y se hacían conjeturas sobre su destino. La Prensa soviética había afirmado que Airikian había pedido emigrar a EE UU al concluir la instrucción del sumario contra él a principios de este mes.

El disidente ha pasado varios días bajo custodia en un hotel de Addis Abeba, la capital de Etiopía, país de orientación prosoviética cuyo máximo dirigente, Mengistu Jaile Mariam, está esta semana en Moscú en visita oficial.

[Airikian declaró a la agencia italiana ADN Cronos que fue detenido por ocho agentes del KGB (Comité de Seguridad del Estado), conducido a Moscú y luego enviado en un vuelo especial a Adis Abeba, donde siguió cuatro días bajo custodia "sin poder salir ni telefonear", informa France Presse.]

En Addis Abeba, los guardianes de Airikian se retiraron cuando éste amenazó con una huelga de hambre, según dijo el disidente Sergei Grigor ants, director de la revista Glasnot y amigo de la familia de Airikian.

Normalidad en Armenia

La normalidad laboral se ha restablecido en Armenia y en Nagorno-Karabaj, aunque-, según afirmaba ayer el diario Pravda, "la situación moral psicológica" es dificil en la república. "No se puede decir aún, señalaba, "que la inmensa mayoría de los habitantes de Eriván acepte con comprensión la disposición del Presidium del Soviet Supremo de la URSS sobre Nagorno-Karabaj".

El Jefe de la Iglesia católica de Armenía, Vazgen I, se lia dirigido a los dos millones de armenios residentes fuera de la URSS, para exhortarles a mostrar "sentido de la responsabilidad por el bien de la Armenia soviética. Vazgen sale así al paso de una eventual reacción violenta de la colon a armenla en el exilio por el rechazo de las reivindicaciones de Nagorrio-Karabaj.