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El comandante Roger Miranda se llevó secretos militares de Nicaragua al desertar a EE UU

Roger Miranda, un mayor (comandante) de 34 años que ocupaba el puesto de jefe de gabinete del ministro de Defensa de Nicaragua, general Humberto Ortega, se llevó, al desertar el martes a EE UU, valiosos secretos militares sobre la estructura de defensa de Managua, organización de la fuerza aérea, de la artillería, de las brigadas de carros de combate y los planes para poner en armas a 600.000 nicaragüenses en caso de invasión. En una conferencia de prensa en Managua, el general Ortega, hermano del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, denunció que a Miranda "lo enamoraron y prostituyeron" en EE UU para convertirlo en "traidor a la Patria" y al Ejército sandinista.

La Prensa de Estados Unidos calificó la deserción de Miranda como la más importante después de que el comandante revolucionario Edén Pastora abandonó Nicaragua para combatir con las armas al sandinismo.En Nicaragua, el ministro de Defensa dio detalles sobre la deserción de su jefe de gabinete y trató de reducir la importancia de la información militar que el desertor puede pasar a Estados Unidos, porque esos datos ya eran conocidos por medio del espionaje con satélites. Según el general Ortega, la información que pudo dar Miranda a Reagan es que aquí hay un pueblo que no está dispuesto a entregarse". El desertor pertenecía al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) desde la insurrección contra la dictadura somocista, en 1978, y tenía ideas revolucionarias ya en los años setenta.

Según Ortega, Miranda aprovechó la visita a Estados Unidos de la primera dama nicaragüense, Rosario Murillo, para, con el pretexto de asistir a la fiesta de 15 años de una hija suya residente en ese país, entablar contactos con la Agencia Central de Inteligencia (CIA) norteamericana. Ortega dijo que el desertor trató de persuadir a otro militar de que siguiese sus pasos, y atribuyó el resentimiento personal de Miranda al hecho de no haber sido ascendido a teniente coronel el pasado julio. El Ejército Popular Sandinista (EPS) introdujo el pasado año los rangos militares clásicos en su estructura, con lo que puso fin a las categorías de los tiempos de la insurrección. Se especuló entonces con que esta distribución de rangos militares tradicionales, dentro del programa de profesionalización del EPS, produciría disputas en las Fuerzas Armadas sandinistas.

El desertor recurrió a su conocimiento del sistema de seguridad existente en el aeropuerto Augusto César Sandino, de Managua durante la estancia en Cuba de su jefe, el general Ortega, el pasado 25 de octubre. La ausencia de Ortega, encargado de autorizar el viaje, fue aprovechada por el desertor. Miranda voló a México, donde estableció contacto con la Embajada de Estados Unidos. No consta si el desertor era un topo infiltrado en el aparato militar sandinista desde hace tiempo. La deserción podría ser utilizada por la dirección sandinista para reforzar la lucha ideológica y el control policial. También se especula que la determinación de responsabilidades puede provocar disputas entre los organismos encargados de la seguridad en Nicaragua.

Concentración de masas

En Managua está prevista para hoy a las cinco de la tarde (medianoche, hora peninsular española) una concentración de masas, con motivo de la entrada en vigor del acuerdo de paz Esquipulas 2, firmado el pasado 7 de agosto en Guatemala. Se esperaba la asistencia de unas 100.000 personas y el anuncio por parte del presidente, Daniel Ortega, a su regreso de Moscú, de una amnistía parcial y del levantamiento parcial del estado de emergencia.En El Salvador el presidente democristiano, José Napoleón Duarte, anticipó que decretará hoy un cese el fuego unilateral y lamentó la ruptura del diálogo con la guerrilla. En la capital mexicana estaba prevista ayer una reunión de representantes del Frente Democrático Revolucionario (FDR) y Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN) con el mediador, arzobispo de San Salvador Arturo Ribera y Damas para tratar de restablecer el diálogo entre ambos frentes y el Gobierno.

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