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Mijail Gorbachov propone limitar la actividad militar en los mares del Norte, de Noruega, Baltico y de Groenlandia

Pilar Bonet

PILAR BONET, El líder soviético, Mijail Gorbachov, propuso ayer un conjunto de medidas de desnuclearización y desarme del Círculo Polar Ártico que implicarán a la Alianza Atlántica y al Pacto de Varsovia en consultas para limitar la actividad militar en los mares Báltico, del Norte, de Noruega y de Groenlandia. En un discurso pronunciado en la ciudad de Murmansk, en la península de Kola (base de la flota soviética del Norte), Gorbachov constató la existencia en la actualidad de "tendencias positivas" en las relaciones internacionales, aunque opinó que la situación sigue siendo "difícil" y "se mantiene el peligro".

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Ante un público en el que abundaban los uniformes militares, Gorbachov elogió las perspectivas de un acuerdo entre las superpotencias sobre los cohetes nucleares de alcance medio y consideró que el logro de los jefes de la diplomacia de EE UU y la URSS en septiembre es "un importante paso en el camino del desarme y el primero en su género desde la II Guerra Mundial.Sorbachov, cuyo discurso fue retransmitido íntegro en directo por la televisión soviética, no dio ningún dato sobre su futura cita con Ronald Reagan. Insistió, no obstante, en que la cumbre de Reikiavik, en octubre de 1986, fue un "acontecimiento", un "viraje" y "un punto de inflexión" cuya importancia había quedado demostrada por la "experiencia". En el pasado, observadores políticos barajaron la hipótesis de que en medios militares soviéticoc no estaban satisfechos con los resultados de la reunión.

El líder de la URSS advirtió que no todo el "potencial" de Reikiavik se ha utilizado. La perspectiva de conversaciones con EE UU sobre las pruebas nucleares justifica, en su opinión, la validez de la moratoria nuclear soviética que se mantuvo durante 18 meses, desde agosto de 1985. Antes de que concluyera, miembros del estamento militar se habían pronunciado a favor de su interrupción, invocando razones de seguridad.

"No todo depende de nosotros", exclamó Gorbachov, para pa,sar después a mostrarse preocupado por la actitud del "complejo militar industrial" norteamericano. Según el líder, a las declaraciones de amor a la paz de los representantes políticos norteamericanos siguen otras de furicionarios y sovietólogos en el sentido de que la URSS representará un peligro y una amenaza para Occidente si la perestroika (reestructuración) sigue adelarte con éxito.

La preocupación de los países deL norte de Europa ante las actividades del polígono de pruebas nucIeares de Novazernlia, al norte vie la URSS -donde, dijo, "se han gastado demasiados medios"-, puede resolverse si EEUU renuncia a sus pruebas nucleares "o las reduce al mínimo en cantidad y potencia".

Medidas de confianza

En vísperas de la llegada del presidente finlandés, Mauno Kiovisto, en visita oficial a la URSS, Gorbachov propuso empezar consultas entre el Pacto de Varsovia y la OTAN para reducir y limitar las dimensiones de la actividad militar naval y aérea en los mares Báltico, del Norte, de Noruega y de Groenlandia, y para extender a ellos medidas de confianza. Éste podría ser "el primer paso" para la extensión de medidas de confianza a todo el Ártico y en la zona del Norte, señaló. Propuso además la prohibición de actividades militares navales en zonas mutuamente acordadas y zonas de intenso tráfico marítimo. Con este fin ofreció la ciudad de Leningrado como sede de un encuentro de los países interesados.

La creación de un programa energético común para el norte de Europa y de un consejo científico del Ártico a establecer en una conferencia que se celebraría en Murmansk formaron parte del conjunto de medidas enumeradas por Gorbachov. Si el clima internacional mejora lo suficiente, la URSS estaría dispuesta a abrir las vías de navegación del Norte a barcos extranjeros y a facilitar rompehielos.

En un paseo por Murmansk, Gorbachov dijo que sus reformas equivalen a "una revolución sin tiros", y pronosticó un difícil periodo en el inmediato futuro. Gorbachov integró en su discurso elementos que pertenecen a concepciones distintas de la reforma.

Por una parte, insistió en la necesidad de un control de calidad, y por otra, en la autofinanciación. El control de calidad, o gospriomka, introducido este año en la industria soviética, se inspira en medidas seme antes existentes en la producción militar.

El líder trató de tranquilizar al auditorio sobre los futuros incrementos de precios y señaló que éstos no se llevarán a cabo contra los intereses de los obreros ni sin discusión previa. Hizo alusión a un sistema de compensaciones o complementos de pensiones para asegurar una distribución más justa de las subidas. Se refirió también Gorbachov a la necesidad de reducir el aparato de dirección estatal, del Gobierno y del partido, donde trabajan 18 millones de personas y que supone el 15% de los recursos laborales del país. Uno de cada seis trabajadores es un directivo, según afirmó. Gorbachov defendió el control de la producción, así como las medidas antialcohólicas, e insistió en que no hay que ceder. "Si empezamos a ceder se romperá el frente de nuestra perestroika y habrá desorganización", dijo.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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