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El dios del Sol

El Coloso de Rodas, una de las siete maravillas del mundo antiguo, fue construido por Cares de Lindos entre los años 292 y 280 antes de Jesucristo. Conmemoraba el levantamiento del sitio al que Demetrio Poliorcetes sometió la ciudad griega durante los años 305 y 304 antes de Jesucristo. Representaba al dios helénico del Sol, Helios, el Apolo romano.El Coloso tenía más de 30 metros de alto (probablemente 32) y se alzaba sobre el puerto, posiblemente protegiéndose, los ojos del sol con una de sus manos. La estatua estaba hecha de bronce, reforzada con hierro y sostenida por enormes piedras, aunque los arqueólogos especulan con la posibilidad de que la estatua estuviese realmente esculpida en piedra y recubierta de bronce. Esta teoría parece confirmarla el historiador romano Plinio, que escribía en el siglo I antes de Jesucristo acerca del Coloso: "Donde las partes están rotas se ven amplias cavernas abiertas en su interior'.

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Los restos hallados en Rodas no pertenecen al mítico Coloso

Es técnicamente imposible que la imponente estatua enmarcase la bocana del puerto con sus piernas, y la creencia popular que así lo afirma proviene de la edad media. La estatua fue destruida por un terremoto hacia el año 225 antes de Jesucristo, permaneciendo derruida a la entrada del puerto hasta que fue saqueada por los árabes, que arrasaron la ciudad en el año 653 de nuestra era. Se dice que los árabes pudieron llenar más de 900 camellos con el bronce de la estatua

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