La herencia sin misterios de Betancur

ENVIADO ESPECIALEl presidente Belisario Betancur ha entregado al que será su sucesor un documento que resume la situación en la que deja el Gobierno de Colombia. "No tenemos misterios ni nada oculto y el empalme con el nuevo Gobierno será público", dijo. En ese documento figuraba, probablemente como problema número uno, la violencia política, que ha causado más de 2.000 muertos en el último año. Betancur deja en este terreno lo que puede ser un esbozo de política para el futuro, pero nada más.

El diálogo con los grupos guerrilleros ha sido reconocido por los liberales como un camino adecuado para lograr la pacificación, pero la firma de acuerdos de paz sin efectuar al mismo tiempo las reformas necesarias para integrar a los guerrilleros han demostado no servir de mucho. Los 27 frentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) siguen en las selvas y los llanos con sus armas listas.

El pacto con el M-19, que no es el grupo guerrillero más poderoso, pero sí el que, por su ideología más abierta, puede atraer a sectores más diversos de la población, se rompió a los pocos meses de su firma. La culpa fue, en parte, de las divisiones internas del M-19, pero también del Ejército, que nunca creyó en el proceso de paz diseñado por el presidente.,

Con Betancur se ha producido una mayor militarización de la vida política. El asalto al Palacio de Justicia, con más de 100 muertos en circunstancias todavía no del todo esclarecidas, fue considerado como una forma de golpe militar interno.

Este país es el segundo principal exportador mundial de café, posee el 40% de las reservas de carbón de América Latina; vende en el exterior algodón, plátanos, tabaco y flores; extrae petróleo suficiente para su consumo; produce el 95% de las esmeraldas del mundo y dispone de oro, plata, platino, zinc, mercurio, fosfatos y reservas importantes de uranio. Con estas posibilidades, los colombianos sólo aciertan a responsabilizar al Gobierno de la pobreza de una gran parte de la población, del crecimiento de la tasa de desempleo y de la pérdida de calidad de vida.