Falleció el escritor italiano Ítalo Calvino
El autor de 'El barón rampante' desafió a lo largo de su vida las convenciones literarias y políticas
El escritor italiano Italo Calvino, de 62 años, murió a las 3.30 horas de la madrugada de ayer en el hospital de Siena en el que había sido ingresado el pasado día 6 de septiembre. Calvino se sintió repentinamente indispuesto cuando se encontraba en su casa de campo de Roccamore, en el litoral de Grosseto, y fue ingresado en estado de coma a consecuencia de una hemorragia cerebral.Una operación posterior que duró seis horas fue superada por el paciente, aunque en los días posteriores los partes médicos señalaron la gravedad de su estado. Hace tres días había entrado en coma irreversible tras sufrir un segundo ataque cerebral que anuló las posibilidades de recuperación.
Calvino, de nacionalidad italiana, nació en Santiago de las Vegas (Cuba) en 1923, "aunque mi nacimiento es oscuro", según declaró en 1981 al programa Apostrophe, de la televisión francesa.
Biografía oscura
La biografía de Ítalo Calvino no es muy conocida, como han comentado diversos críticos. Se educó en San Remo, en la Riviera italiana, hasta los 20 años, y participó en la Resistencia, en la brigada Garibaldi (Partido Comunista Italiano), durante los últimos meses de la II Guerra Mundial. Esta experiencia se recoge en su primer libro, El sendero de los nidos de araña, de 1947 (presentado por Cesare Pavese, de quien se considera discípulo): es una visión de la resistencia y la guerra a través de las experiencias de un niño.
Terminada la guerra, se establece en Turín y trabaja en la editorial Einaudi, colabora en el periódico comunista L'Unitá y termina una licenciatura en Letras. Después de sus obras realistas, Calvino comienza a escribir sus fábulas y alegorías que le harán famoso. En 1957, a consecuencia de los sucesos de Hungría, abandona el PCI . Sin dejar la colaboración con Einaudi, se establece en París, en un momento impreciso, y regresa a Italia en 1980, instalándose en Roma, en una vieja casa del centro, a unos pasos del Panteón.
En su obra, Calvino trata de temas trascendentes -la frustración, el aislamiento y la deshumanización del hombre del siglo XX-, pero su aproximación se hace con un alto sentido de la ironía y con humor. Obras alegóricas como El barón rampante sugerirían que una respuesta a las presiones de la vida moderna reside en una lucha por la independencia y el conocimiento de sí mismo.
Otra obra realista de Calvino, inspirada también, como El sendero de los nidos de araña (1947), en la resistencia italiana durante la II Guerra Mundial, fue Último viene el cuervo (1949), libro de cuentos que recoge "lo que va a ser el marchamo típico de Calvino: la realidad transfigurada" según escribió una de sus traductoras al castellano, Esther Benítez.
Mundo alegórico
Después de éstos y de otros escritos, Calvino dio un cambio a su trayectoria realista para introducirse en el mundo fantástico y alegórico, con obras que le dieron gran reputación, como, El vizconde Demediado (1952). Esta obra, junto a El barón rampante (1957) y El caballero inexistente (1959), forma la trilogía Nuestros antepasados.
El barón rampante es quizá su obra más conocida. Trata de un noble del siglo XIX que sube a vivir a los árboles, habitando en otro mundo, tibio y vital, que él ha creado entre las ramas y desde el que busca su identidad, "lo único no programado del universo".
La postura del hombre moderno ante la tecnificación es uno de sus temas recurrentes. La propuesta de Calvino es contemplar el mundo contemporáneo y describirlo.
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