_
_
_
_

No te metas por algo será

Entre 1976 y 1982 el No te metás, frase que retrata toda una filosofía vital porteña, fue prácticamente la consigna de una sociedad atemorizada y profundamente confundida. La frase se completaba con otro latiguillo verbal -por algo será- cada vez que en el entorno familiar, laboral o amistoso desaparecía un pariente, un compañero, un amigo.Pocos argentinos, por no decir ninguno, -ni siquiera Borges, a quien en plena represión le preguntaron por la lucha antisubversiva y contestó: "Se están comiendo a los caníbales"-, desconocían la barbarie que se estaba perpetrando.

El Estado militar, y con él toda la población, pagó su precio por tanta estupidez y cobardía civil: José Alfredo Martínez de Hoz, profesor del Colegio Militar de la nación y mago suramericano de las finanzas, subvaluó el dólar hasta niveles ridículos y liberalizó las importaciones para dar sustento a la barbarie de Videla, Viola y Galtieri, Privados de libertades públicas y con miles de desaparecidos a su alrededor, los argentinos encontraron alivio en los automóviles japoneses de importación y en las vacaciones en Europa a precio artificial.

Más información
Desaparecido

No es de extrañar, así, la escasa asistencia a las manifestaciones semanales de las madres y abuelas de Plaza de Mayo en reclamo de su o sus desaparecidos, la reducida asistencia al juicio de Buenos Aires y la modesta atención que a la pasada barbarie dedican los periódicos. Un extendido sentimiento de culpabilidad colectiva por silencio y omisión, durante los años del espanto, en el que el dinero florecía fácil como los geranios, cubre a la sociedad argentina como un poncho de ignominia cuyo peso se pretende olvidar.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_