Éxito de la jornada de ayuno convocada por la Iglesia chilena contra la violencia

Miles de católicos chilenos llenaron los templos de Santiago la noche del viernes en respuesta a la llamada del arzobispo Francisco Fresno, que pidió una jornada de ayuno y oración masiva contra la violencia política y por el levantamiento del estado de sitio en el país. La jornada fue calificada por fuentes eclesiásticas como "un completo éxito", y se transformó en la primera manifestación masiva contra el régimen militar desde la implantación del Estado de sitio hace tres semanas.El ayuno y las misas de oración se realizaron en forma pacífica, como había pedido el arzobispo Fresno. A la salida de los templos, muchos participantes golpearon sus palmas cantando "Y va a caer, y va a caer", aludiendo al régimen encabezado por el general Augusto Pinochet. La policía no se hizo presente y no se informó de incidentes, [pero en la mañana de ayer, fuerzas policiales y del Ejército iniciaron una nueva redada en varios barrios de Santiago, según informó la agencia France Presse].

Los dirigentes de la Alianza Democrática y del Bloque Socialista acudieron a la misa central, oficiada en la capital metropolitana por el sacerdote Santiago Tapia, designado para suceder al jesuita español Ignacio Gutiérrez, expulsado del país el 8 de noviembre.

Dirigentes de la poderosa central sindical opositora, Comando Nacional de Trabajadores (CNT), acudieron a una misa masiva que ofició el vicario Regio Baeza, quien pidió "por los perseguidos, los allanados, los confinados y todos los afectados por la represión". "Estamos aquí en solidaridad con la Iglesia", dijo Ricardo Lagos, presidente de la Alianza Democrática.

La Iglesia católica ha criticado abiertamente la reimplantación del estado de sitio ordenada por Pinochet el 6 de noviembre, que trajo como consecuencia la expulsión del sacerdote Gutiérrez, la censura a declaraciones de los obispos, la suspensión de actos pastorales en Santiago y Punta Arenas (el extremo sur) y la suspensión de las clases en dos universidades católicas.