La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional libera a Jaime Betancur, hermano del presidente de Colombia

El abogado Jaime Betancur, hermano del presidente de Colombia, Belisario Betancur, fue liberado ayer por la mañana, después de que una comisión secreta negociara en nombre del Gobierno colombiano con los secuestradores, pertenecientes al grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN), según informó Efe.

Entre las condiciones pactadas, podría encontrarse la liberación de 16 prisioneros políticos. Jaime Betancur, de 53 años, que había sido secuestrado el 22 de noviembre pasado en Bogotá, se encuentra bien de salud, según señalaron fuentes solventes.Los guerrilleros del ELN convocaron a tres periodistas colombianos y a un comisionado de paz a los que, con grandes precauciones, trasladaron hasta el lugar, probablemente cercano a Bogotá, donde estaba el rehén rodeado de una docena de hombres provistos de metralletas

El presidente Belisario Betancur habló por teléfono con su hermano pocos minutos después de la liberación, ocurrida a primera hora de la mañana de ayerEn la conferencia de prensa improvisada por los secuestradores, representantes del ELN dijeron que, pese a no haberse cumplido todos los requisitos exigidos para la puesta en libertad del rehén, se había logrado el principal objetivo del grupo, consistente en dar a conocer la situación en la zona de Magdalena Medio. Esta región, situada junto al río del mismo nombre, es rica en recursos minerales, pero está atrasada, por la falta de comunicaciones. El grupo negó ser procastrista, como habían creído algunos medios. Posteriormente, el ELN envió a la Prensa colombiana un comunicado, según el cual el Gobierno pondrá en libertad a 16 presos políticos de la organización.

El texto asegura que el Gobierno se ha comprometido a la congelación de los precios en los artículos de primera necesidad hasta el 1 de julio de 1984, y a unificar el salario mínimo en 175 dólares (unas 27.000 pesetas). El mensaje admitía, sin embargo, "no haber llegado a un acuerdo satisfactorio".

Las personas elegidas para dar testimonio de la liberación de Jaime Betancur acudieron a la cita con los secuestradores provistos de gafas negras y tras un rodeo de más de una hora con diversos cambios de recorrido.

Jaime Betancur, que presentaba un aspecto de gran agotamiento, fue abandonado en la calle por los guerrilleros.

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