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El abogado Ruiz Balerdi y su defendido Onaindía ganan el Ciudad de Irún de novela

El secretario general de Euskadiko Ezkerra, Mario Onaindía, y el concejal del ayuntamiento donostiarra por este mismo partido, Pedro Ruiz Balerdi, han obtenido los premios de novela Ciudad de Irún (en la modalidad de euskera y castellano, respectivamente) en la décima edición de este concurso literario que convoca la Caja de Ahorros de Guipúzcoa. Para los dos ganadores ha si lo una feliz casualidad la coincidencia en conseguir esta gemela literaria, ellos que otrora fueran abogado y defendido, y el primero sirviera de correo y abastecedor apaciguador a la avidez y curiosidad literarias del que entonces fuera preso de ETA. En nada se parecen sus obras: Mis otros, la de Ruiz Balerdi, añorante y localista; Gile,el, Garateako batxilerra (Guillén, el bachiller de Garatea), la de Onandía, se encuadra entre las novelas históricas."Mi novela es una obra de ficción, pero en ella se describe una época histórica. la Vizcaya del siglo XV", explica Onaindía. "Está escrita en lenguaje romance y en ella se refleja la literatura de época, que era entonces la novela de caballería. La creación de este euskera de novela de acción es un trabajo que me apaecía especialmente realizar, parte contribuir a hacer una literatura clásica, que es la que falta al euskera".

El momento elegido por Onaindía para situar su relato es el año 1443, siete años antes de la firma del Fuero. Una época crítica, con fuertes luchas de banderías, llena de contradicciones, y en la que se da una relación de fuerzas que propicia el acuerdo entre la nobleza y la monarquía materializado en el Fuero. "La situación guarda cierta similitud con la actual", explica Onaindía; "en esa época se produce un movimiento ideológico interesante, al surgir en Durango una secta de herejes, anterior a Lutero, que denunció la Inquisición. Mi novela cuenta el viaje que realiza para investigar este movimiento el bachiller Guillén, enviado desde Roma por su tío, un cardenal. El bachiller viaja por toda Vizcaya guiado por un enano, figura que puede parecer metafórica, pero real entonces".

Según Onaindía, la existencia de los herejes en Durango es histónca, aunque sólo se conocen de ella las acusaciones de la Inquisición, puesto que sus archivos fueron quemados después de la guerra de la Convención, en 1793, por miedo a que los revolucionarios franceses se convirtieran en sucesores de los herejes. Explica Onaindía que el movimiento heterodoxo que se produce entonces en Euskadi coincide con muchos fenómenos europeos originados en base a la filosofía musulmana. "En la novela se da la evolución de un amor platónico a lo divino hacia un amor casi árabe, muy sensual". El autor de la novela reconoce que la suya tiene cierto afán experimental, carácter que ha de tener la literatura en euskera, por el hecho de carecer de historia propia. El euskera, que a su juicio permanece literariamente en estado lírico, apegado a preocupaciones adolescentes e influido por las corrientes intimistas en la novela, requiere un desarrollo de la narrativa de acción fuera, incluso, del contexto inmediato que proporciona la realidad sociológica de Euskadi.

Mis otros es la segunda novela de Ruiz Balerdi, en la que un narrador recuerda su infancia y refleja el ambiente social donde ha pasado su primera infancia. "Parto del principio de que toda persona es como le han hecho, y se ha hecho a través de su familia y de su barrio; en definitiva, los que le están formando", explica Ruiz Balerdi. "En esta novela hago un repaso de la infancia de la posguerra y el ambiente de formación en un barrio donostiarra, como es el de Amara Viejo".

No es la suya una obra crítica, sino una novela añorante, "llena de nostalgias y saudades", con mucho carácter autobiográfico, aunque tenga muchas cosas inventadas. "El resultado ha sido la exístencia de un niño feliz, que fue feliz en su infancia y su barrio a pesar del contexto de posguerra".

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