Nicaragua denuncia nuevas incursiones al norte del país

El jefe de las Fuerzas Armadas nicaragüenses, comandante Humberto Ortega, ha informado de que nuevos grupos han penetrado en el país, en tres direcciones, para apoyar a los antisandinistas que, desde febrero, combaten en la zona norte, fronteriza con Honduras, informa France Presse.La intensificación de los combates no parece, sin embargo, amenazar gravemente la supervivencia del régimen, cuyos dirigentes multiplican las denuncias del intervencionismo norteamericano y las apelaciones a la ayuda de los países amigos, en tanto se acelera la movilización de las milicias.

"La normalidad en el país está plenamente garantizada por el régimen revolucionario", afirmó ayer Sergio Ramírez, miembro de la Junta de Gobierno, quien puso como ejemplo que de jueves a domingo será fiesta en todo el país.

La Prensa de Estados Unidos, ofrece amplios detalles de la implicación de este país en el conflicto, como el envío de armamento para los campamentos somocistas en Honduras y el inicio de la construcción de tres nuevos aeropuertos y una estación de radar.

Washington da la callada por respuesta a las informaciones de que el embajador en Tegucigalpa, John Negroponte, es la cabeza de un organismo político-militar encargado de transmitir instrucciones a los grupos de acción antisandinistas, informa Le Monde.

No obstante, la situación continúa siendo preocupante, tanto en el Norte, en la frontera con Honduras, como en el Sur, donde persiste la amenaza de que los grupos antisandinistas refugiados en Costa Rica pasen a la acción.

Por otra parte, según The New York Times, el ministro nicaragüense de Justicia, Tomás Argüello, ha reconocido ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU que, a causa de "actos de agresión emprendidos por la CIA", su Gobierno se vio obligado a declarar el estado de emergencia y a suspender ciertos derechos legales, como el de autodefensa. Un documento presentado por el propio ministro asegura que 465 indios misquitos fueron detenidos o encarcelados.