_
_
_
_

'Guerra' comercial en el mercado de ganado de Pola de Siero

La guerra comercial declarada entre varios grupos de compradores de ganado vacuno, especialmente de terneros, amenaza con estrangular el mercado de Pola de Siero, el único de carácter nacional de Asturias, situado a 15 kilómetros de Oviedo.

El conflicto surgió, de una parte, por el choque entre dos potentes grupos catalanes de compradores de ganado que abastecen importantes criaderos de Cataluña, uno de los cuales tiene sobre el otro la ventaja de contar con agentes asturianos para realizar aquí las compras. El 90%, de los terneros comercializados en Pola de Siero, unos 5.000, son transportados semanalmente a la zona catalana para su engorde y posterior venta.A este problema se ha sumado la propia problemática del mercado de Pola de Siero, que se encuentra desbordado por un enorme volumen de transacciones, como consecuencia de su situación privilegiada como lugar de confluencia de la corriente comercial del resto de los mercados nacionales de la zona norte (León, Santiago y Torrelavega), circunstancia que obligó el incremento sucesivo de los días hábiles para la negociación del ganado.

Las protestas

El recinto ferial sólo se abre lunes y martes, pero para facilitar las transacciones, desde el sábado y domingo anteriores a la celebración del mercado, las reses son vendidas en Pola de Siero, incluso, sin ser bajadas de los camiones y sin pasar el preceptivo control sanitario.La ausencia de un día fijo para la comercialización provocó la protesta de uno de los grupos de tratantes catalanes que invitó a sus suministradores habituales de reses a boicotear el mercado de Pola de Siero para comercializarlas en Avilés, el sentirse perjudicado por el grupo competidor, cuyos agentes asturianos realiza las adquisiciones en cualquier momento. En la primera jornada de boicoteo se ha producido un enorme desconcierto entre los vendedores que no sabían si desplazarse a Pola de Siero o Avilés.

Las autoridades municipales de Pola de Siero tratan, denodadamente, de poner orden en la anarquía comercializadora actual, pero son conscientes de que la única alternativa es un nuevo mercado, del que ya existe un anteproyecto que está a la espera de la aprobación por parte de la Administración central. El Ayuntamiento dispone ya de los terrenos para este mercado que costará mil millones de pesetas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_