_
_
_
_
La crisis polaca

Carrillo considera que la situación polaca demuestra el fracaso en la exportación del modelo, soviético

"El fracaso del Partido Obrero Unificado de Polonia (POUP, comunista) sólo se puede explicar como el fracaso de la exportación por parte de la Unión Soviética de su modelo a otros países y de mantenerlo contra viento y marea", declaró ayer Santiago Carrillo, secretario general del Partido Comunista de España (PCE), en una conferencia de Prensa en la que presentó el documento elaborado por el Comité Central del PCE en su reunión del pasado fin de semana. En este informe se reitera la condena de la situación creada en Polonia por la implantación de la ley marcial.

Más información
La OTAN se abstiene de adoptar sanciones contra la Unión Soviética por su responsabilidad en los acontecimientos polacos
Unión nacional contra el totalitarismo en Francia
Berlinguer, favorable a la superación de los dos bloques
Reagan pretende dar un golpe propagandístico en la CSCE
España, inmediatamente informada por Luns
El Papa pide que no se sofoquen las conciencias de sus compatriotas

El documento del PCE mantiene que "a única posibilidad de solución pacífica y democrática real para Polonia sigue estando en la abrogación de la ley marcial y la recuperación del diálogo responsable entre el POUP, el sindicato Solidaridad y la Iglesia", y se pronuncia por el restablecimiento inmediato de las libertades suspendidas y el cese de la represión.Carrillo, que se refirió al actual agravamiento de la crisis en el PCE como "un intento claro de meternos entre las piernas la crisis del partido para ocultar un tema más fundamental, Polonia, y lo que de él se desprende", señaló que era inaceptable la aparición de una junta militar en dicho país. Sobre las causas de la crisis polaca dijo que al chocar con la realidad el partido y el Estado "se han desmoronado bajo la presión de la clase obrera, de los campesinos de los universitarios, es decir, de aquellas clases sociales que, desde una concepción marxista, deberían ser las que ejerciesen el poder".

El fracaso del régimen polaco lo hizo extensivo Carrillo a los demás países del área socialista, especialmente a la URSS, y señaló que la exportación del modelo soviético ya había demostrado su fracaso en Checoslovaquia.

Para el secretario del PCE hay que caminar hacia nuevas y más flexibles fórmulas de articulación del movimiento comunista internacional, "que tiendan a superar la escisión histórica entre socialistas y comunistas e integren a los movimientos de liberación del Tercer Mundo".

Tanto Carrillo, en su conferencia de Prensa, como el documento del PCE mantienen que, si se ha agotado el "modelo histórico comunista de articulación internacional", lo mismo ha ocurrido con el modelo socialdemócrata, y reafirman la vía eurocomunista hacia el socialismo y la necesidad de superar la política de división en bloques militares que limitan la soberanía de los países bajo su zona de influencia.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Las tesis expuestas en ambos casos son muy similares a las del Partido Comunista italiano (PCI) en su análisis de la crisis polaca. Sin embargo, hay una diferenciación entre los dos partidos a la hora de analizar el papel de la Revolución de Octubre en el seno del mundo comunista.

El PCE señala que "nosotros seguimos considerando a la gran Revolución de Octubre como el acontecimiento más decisivo de la historia humana en esta época", pero fue desvirtuada posteriormente por el modelo que Stalin impuso al Estado y al partido de la URSS, y que fue exportado a los otros países socialistas.

Los comunistas italianos, por su parte, mantienen que el impulso renovador que supuso dicha revolución se ha agotado, como demuestran los sucesos polacos.

El documento del PCE condena las medidas de represalia adoptadas por la Administración norteamericana, "que no son una ayuda al pueblo polaco, sino una manipulación escandalosa de los sufrimientos de Polonia para afirmar su política belicista.

El documento, en sus conclusiones, afirma los valores de la democracia y del pluralismo en la organización del poder del Estado y reitera el carácter laico del Estado, tanto en el orden religioso como en el filosófico, y la aceptación del juego de mayorías y minorías, a través de la pluralidad de partidos y de la alternancia en el poder, así como la defensa a ultranza de los derechos individuales y colectivos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_