Antonio Gala: "Lorca durará más que las consecuencias de un régimen político"

El escritor Antonio Gala ha dicho en Santander que pueden existir tres concomitancias sobresalientes entre Lorca y él: Andalucía, la poesía y el teatro, entendiendo Andalucía como una manera de ser poesía, como una manera de conocer, y teatro, como una manera de expresarse.Antonio Gala, que hablé en el seminario internacional que sobre Cultura, sociedad y política en el mundo actual se está desarrollando en la Universidad Menéndez y Pelayo, explicó que sus Apuntes sobre el teatro de Lorca tenían la intención de «ver o invitar a ver a Lorca en sus estrictas dimensiones de escritor, no en las de amigo incomparable, no en las de hombre encantador, no en las de víctima», porque un espectáculo como el de la vida y muerte de Lorca no puede ser perpetuado por el recuerdo. «Este durará lo que duren los datos causantes, mientras que su obra literaria debe, sin embargo, durar más que un régimen político y que sus conecuencias».

Para Antonio Gala se ha visto confirmado el temor de que el universo poético de Lorca se desnaturaliza a fuerza de superficialidad. «De su vida se ha hecho un cuplé. Cien malos flamencos recitan, adulterados, sus poemas. Toda la mediocridad de su época lo conoció, lo trató, lo vaticinó... Y a esto se le llama olor de multitudes: la multitud, que yo sepa, nunca ha olido bien», dijo, subrayando que «pasar de ser objeto, no sujeto, de romance le viene bien a la efímera gloria de un torero, no a la del escritor».

Doble riesgo

Según eso, Lorca y su memoria corren un doble riesgo: o transformarse en un testaferro populachero (lo que le sucedió a Quevedo), cuya obra no se conoce precisa mente porque se conoce todo lo que no es su obra, o sufrir una de valuación en el gusto universal, como la que sufrieron Zuloaga o Blasco Ibáñez. «Cualquiera de las dos posibilidades es funesta y, por eso, las preocupaciones que tomemos para restablecer a Lorca en su verdadero puesto, tanto en nuestra literatura como en la universal, nunca serán bastante numerosas».Después de una referencia a la generación poética del 27, estudiada estrictamente como generación literaria, tan diferente de la del 98, que tuvo más amplias proyecciones, y de un estudio de Lorca con referencia al romance como opción clave en su obra, Antonio Gala afirmó que la poesía del autor del Romancero gitano «más que lírica es dramática ya, imprecativa, argumentada y con la misma dosis de lirismo que sus dramas».

Pemán y el señorío andaluz

La estancia santanderina de Antonio Gala coincide con el estreno en el teatro Cinema de su última obra, La vieja señorita del paraíso, a la que seguirá en los próximos días Petra regalada. Si para escuchar las conferencias de Gala hay siempre un público dispuesto a rebosar las aulas, en su teatro el fenómeno se acrecienta: Gala pone siempre en Santander el no hay billetes. El secreto está, según él, en que escribe para el público, no para los críticos.«La mujer es mucho más representativa de la. humanidad que el, hombre, más atractiva en escena, más expresiva», dijo ayer Antonio Gala. Preguntado por Pemán, frente a Lorca, afirmó: «Pemán era la encarnación del señorío andaluz; no ha habido mejores artículos que los escritos por él».