Los silbidos al ministro

Ante la carta del ministro de Cultura, Ricardo de la Cierva, aparecida en su diario en el día 21 de este mes, nos vemos obligados a contestar expresando nuestra indignación por su contenido.En principio, es curioso observar las continuas alusiones del ministro acerca del desconocimiento general de la ley de Cultura Física y Deporte, observaciones hechas tanto a los alumnos del INEF (en el programa radiofónico Hora 25 del día 18 de febrero y en la reunión celebrada en el INEF) como al redactor de su periódico Alfredo Relaño. Según parece, el único que ha tenido el «privilegio» de leer e interpretar esta ley ha sido Ricardo de la Cierva. ¡Enhorabuena, señor ministro!

Por nuestra parte, seguimos sin ver las «profundas» modificaciones de esta ley en el Senado. Ya se ve, el ministro es duro de oído, y nosotros, «cortos de vista».

También alude el ministro al escaso sentido de la profesionalidad del señor Relaño. Nosotros nos preguntamos por la profesionafidad de los responsables de un partido que promete y no cumple. (En los programas electorales de UCD se concedía el rango de facultad universitaria a los estudios de educación física). Esto es comprensible desde el momento en que UCD ha olvidado el significado de estas dos palabras, sustituyéndolas por tina sola: deporte.

En cuanto a su encuentro con los alumnos del INEF, es cierto que hubo una respetuosa y mínima ovación de entrada al ministro. Ricardo de la Cierva debió confundirla con la gran ovación con que segundos más tarde se recibió al senador del PSOE Francisco Delgado, volviendo a deslumbrarnos con su dureza de oído, máxime cuando -afirma no haber escuchado los tímidos silbidos con que fueron acogidas algunas de sus intervenciones.

A su disposición tenemos la grabación completa de dicha reunión, en la que podrán comprobarse estos hechos.

Desde aquí volvemos a expresar nuestro indudable apoyo al senador Francisco Delgado, como ya lo hemos hecho en repetidas ocasiones.

Por tanto, pensamos que la tomadura de pelo a los lectores de EL PAIS no parte del señor Relaño, sino del ministro.

Por último, reseñar que nos parece poco honrado calificar en este. diario de «absurdo manifiesto» el comunicado que se le entregó al ministro por parte de un alumno en representación de toda la asamblea, cuando en la misma había dicho que le parecía muy bien, aunque no podía firmarlo. Y en lo que respecta al alumno que manifestó su deseo de marcharse ante las sucesivas negativas del ministro a las propuestas de la asamblea, en cualquier caso lo hizo como postura personal, sin intencionalidad alguna de arrastrar a sus compañeros, que, por otra parte, refrendaron su postura levantándose un considerable número de ellos, dándose a continuación la reunión por terminada.

Asimismo, animamos al señor Relaño a que siga redactando sus artículos con la misma fidelidad con que lo ha hecho en esta ocasión.

Representante de los alumnos del INEF de Madrid