El viaje del Rey a la Argentina

«( ... ) La controversia sobre el viaje del Rey ha llevado a la prensa de izquierda, por primera vez desde las elecciones del 15 de junio de 1977, a formular algunas críticas, es verdad, muy ligeras, al rey Juan Carlos. Se le reprochan sus desplazamientos frecuentes, sin discriminación y sin consulta previa con el Parlamento. El semanario Triunfo compara la actividad nómada del soberano a las de otros monarcas europeos que no viajan sino raras veces y explicándose concienzudamente antes de emprender el viaje. (...)Los socialistas han invertido algunos de los argumentos de Marcelino Oreja, y es que para defender el prestigio de las instituciones democráticas y la figura del Jefe del Estado en una monarquía parlamentaria, el viaje debería ser aplazado. (...)

Estiman que el general Videla va a utilizar el viaje de Juan Carlos para legitimar su dictadura, y es lo que diferencia el viaje a Buenos Aires del realizado a Pekín ( ... ).

Los exiliados argentinos, numerosos en España, y los nostálgicos de la hispanidad participan activamente en la polémica. Cartas de lectores y editoriales han mencio nado que el día mismo que se anunciaba el viaje del Rey, un dirigente sindicalista argentino desaparecía y que 35 españoles forman parte de la lista de desapa recidos en la Argentina desde mar zo de 1976. La píldora es tanto más amarga para la izquierda española teniendo en cuenta que hace algunas semanas el jefe del Estado Mayor del Ejército, el general Tomás de Liniers, había hecho un vibrante elogio del régimen argentino cuando estuvo en Buenos Aires para condecorar al general Videla ( ... ).»

5 septiembre