Asesinatos, secuestros y desapariciones de exiliados políticos latinoamericanos

Los asesinatos de líderes y exiliados latinoamericanos importantes, y el secuestro y desaparición de muchos refugiados, ha convertido en dramática la situación de unas 15.000 personas que huyeron en los últimos años a Argentina para buscar asilo de los regímenes de Chile, Uruguay, Bolivia y Paraguay.El pasado mes al menos 20 refugiados uruguayos, la mayoría de ellos opositores de izquierda de los militares, fueron secuestrados de sus casas o en las calles, por hombres armados. Desde entonces, no se ha sabido más de ellos.

Según fuentes de los exiliados uruguayos, sin embargo, Hugo-Gatti, un refugiado líder trabajador que fue secuestrado en julio, fue visto por un prisionero liberado en un centro de detención policial. Las fuentes dijeron que había perdido un ojo a consecuencia de la tortura a que le sometieron miembros de la inteligencia uruguaya que operan aquí en cooperación con los agentes de seguridad argentinos.

El asesinato y secuestro de refugiados políticos, llevó a las Naciones Unidas a pedir a través de su Comisión para los Refugiados, que tiene registrados 8.500 exiliados en Argentina, a realizar un llamamiento a 34 gobiernos occidentales para que cooperasen en la reubicación de estos refugiados.

Hasta el presente se han concedido 1.600 visados por Canadá, Austria, Suecia, Gran Bretaña, Francia, Dinamarca y Suiza. En algunos casos urgentes se han concedido para personas ocultas visados de emergencia por embajadas europeas.

Los que corrían más peligro eran los militantes políticos de izquierda que huyeron de las dictaduras militares de derechas de Chile, Uruguay, Brasil, Paraguay y Bolivia, y se refugiaron en este país cuando los peronistas controlaban el gobierno, desde 1973 hasta marzo de este año.

Existen signos fehacientes de estrecha cooperación entre la inteligencia militar , argentina y las de los países vecinos, en la caza y captura de refugiados políticos activos. Los hombres armados que se apoderaron de los 20 uruguayos mostraron credenciales policiales o militares.

La mayoría de ellos eran miembros de un grupo clandestino de oposición conocido.como «Resistencia de Estudiantes-trabajadores », que mantenía relaciones con grupos laboristas clandestinos de Uruguay. Uno de los secuestradores era Margarita Michelini, hermana de Zelmar Michelini, un senador secuestrado y encontrado luego muerto en mayo.