Se obtendrán alimentos animales a partir de las basuras

Cada día los madrileños, al igual que otros pobladores de grandes ciudades, dejan en los cubos de la basura toneladas de materia orgánica. Son los residuos o desperdicios caseros, cuyo aprovechamiento va a ser estudiado a fondo, por el Instituto de Alimentación y Productividad Animal, del Coonsejo Superior de Investigaciones Científicas.

Plásticos, trapos, mondas de naranjas o patatas, raspas de pescado, huesos de carne, cáscaras de huevo... Estos son algunos de los productos que diariamente se abandonan en el cubo de la basura. Ya existe en Madrid una planta piloto donde esas materias son separadas y clasificadas. Se trata de Adcro una empresa dependiente del Instituto Nacional de Industria (INI).Allí se separan estos restos por los más diversos procedimientos. Mediante ventiladores se separan las materias más volátiles: papeles trapos...Con grandes electroimanes se extraen los productos metálicas como latas u otros desperdicios Los materiales finos pero pesados que no son arrastrados por los ventiladores caen en unos tambores, donde se recogen.

Aprovechamiento

El problema de las basuras es doble. Por una parte suponen molestias haciendo deseable su eliminación. En la línea de su más fácil eliminación están productos -como el Byoplastic británico que se elimina sólo en los vertederos. Por otra parte, se trata de aprovechar las basuras, de elaborar la materia abandonada para extraer todo lo aprovechable de ella. Vicente González, investigador científico del Instituto de Alimentación y Productividad Animal, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha explicado a EL PAIS los objetivos de un proyecto de investigación para aprovechar las basuras. «El título del proyecto -ha dicho- es Aprovechamiento de la materia orgánica de los residuos sólidos urbanos para la obtención de proteínas. Se trata de ver qué posibilidades hay en las distintas fracciones que se obtienen de las basuras pata alimentación o para procesos industriales».Precisamente eso es lo que se está haciendo en la planta piloto del INI, situada en la carretera de Andalucia. Y existen plantas en otras capitales españolas donde el proceso está industrializado. En esas otras factorías se utilizan los productos elaborados a partir de las basuras para obtener compost (abonos). «El objetivo final de la investigación que queremos hacer -explica el doctor González- consiste en el establecimiento de la base de viabilidad de un posible proceso industrial original que permitiría la utilización de un subproducto, la fracción orgánica obtenida en el proceso de tratamiento de residuos sólidos urbanos»

Consecuencias económicas

A la vista de los resultados de este primer proyecto, es evidente la proyección económica que podría tener el tema. Para los autores de la investigación se trataría de: «Primero, poner a disposición del mercado un concentrado proteico a precio inferior a la harina de soja, elemento importante en la ahmentación animal. Segundo, liberar el comercio exterior nacional de la importación de concentrados proteicos. Tercero, abaratar el costo de la alimentación de aves y cerdos. Cuarto, disponer de una patente nacional de indudable atractivo para los países cuyas industrias en piensos están en dependencia forzosa del mercado de los Estados Unidos».