El infierno del crédito
Entre las frases que se han asentado en nuestras conversaciones alrededor de la crisis económica hay una que se configura al mismo tiempo como paradigma social, económico e incluso moral: hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Pero, ¿los de arriba o los de abajo? ¿Los gobernantes o los ciudadanos? ¿Los que pedían los créditos o los que los daban? Una vida mejor, interesante reflexión de Cédric Kahn, se acerca a una de estas historias con convicción, falta de prejuicios, equilibrio y delicadeza. Sin maniqueísmos.
Una vida mejor
Dirección: Cédric Kahn.
Intérpretes: Guillaume Canet, Leïla Bekhti, Slimane Khettabi, Abraham Belaga.
Género: drama. Francia, 2011.
Duración: 112 minutos.
Una joven pareja, él, cocinero, ella, camarera, decide comprar un local semiderruido junto a un bosque y un lago para montar su propio restaurante, su propio negocio, su propia vida laboral. Pero entre el sueño y el infierno siempre se interponen los créditos. O, mejor, el sistema. ¿Una vida mejor, o el inicio de un camino en el alambre, el pasaporte directo hacia la destrucción? ¿Se puede luchar contra el sistema? ¿Qué es la (ir)responsabilidad? Y aquí viene la frase: ¿qué es vivir por encima de nuestras posibilidades? A través de un relato con constantes elipsis, Kahn dibuja el estado de la cuestión y su película fluye con gran naturalidad, sobre todo en su primera mitad, cuando el sueño aún se puede lograr y necesita que el espectador esté tranquilo. Es entonces cuando las elipsis quedan marcadas fundamentalmente por fundidos a negro, clasicismo que relaja. Una metodología de montaje que se va cambiando por cortes más abruptos, conforme la losa va aplastando las cabezas de los protagonistas, cuando quizá se han dado demasiados saltos mortales sin red. Y ahí entran los de siempre: los mediadores, los aprovechados, los criminales.
Kahn nunca juzga. Solo muestra. Una vida mejor no es una película de tesis. Es el espectador el que debe responder a la pregunta. No a si hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, en general. Sino en particular: ¿lo hizo esta pareja, fueron unos irresponsables? Respuesta del crítico: sí.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.