Andalucía en pantalla grande

"Panorama Andaluz está muy bien porque sirve para estructurar la industria emergente andaluza y da la posibilidad de entrar en circuitos en los que por nuestra cuenta no podríamos abarcar", dice Felipe Gonzalez, productor ejecutivo del documental andaluz La escuela expandida, de Julio Sánchez Veiga.

Ésta es una de las 20 producciones, entre largometrajes, documentales y cortos andaluces, que se proyectará durante el festival en la sección no competitiva Panorama Andaluz, en la que destacan las coproducciones con empresas internacionales.

Un ejemplo de ello es la coproducción entre España, Noruega y Alemania La joven de las naranjas, que el año pasado se presentó como proyecto y que este año está en la sección oficial. Su directora Eva Dahr, grabó en Sevilla con la productora sevillana Jaleo Films. "El equipo es maravilloso y Sevilla tiene unas localizaciones preciosas", valora la directora noruega.

Panorama Andaluz es un punto de encuentro para todo el sector

El torero Pepe Luis Vázquez y los fotógrafos de Afal centran dos filmes

También son coproducciones La pérdida (España, Argentina), que reflexiona acerca del exilio de intelectuales, académicos y científicos; Los sabios de Córdoba. Averroes y Maimónides en su tiempo y el nuestro, una coproducción entre España, Alemania y EE UU; La luna en ti (España, Francia, Eslovaquia), en la que una mujer investiga sobre la menstruación, y Rediscovering pape (España, Polonia), en la que la directora María Royo descubre en un documental el pasado nazi de su bisabuelo.

La canadiense Iván Noel, tras 15 años de residencia en Andalucía, trabaja con su productora en España para su filme Brecha.

Y también se queda en España para producir su película la realizadora sevillana Pilar Távora, que presenta su último trabajo, Madre amadísima, una historia sobre la vida de un homosexual en el franquismo.

La productora La Claqueta Metálica presenta su segundo estreno consecutivo de corto documental en Panorama Andaluz. El año pasado retrató la vida del torero Ignacio Sánchez Mejías, y este año, la de Pepe Luis Vázquez. "Gracias a la difusión del año pasado hemos producido la de este año", cuenta su productor Olmo Figueredo. "La distribución de un documental es casi imposible y es muy difícil verlos en pantalla grande. Esto es una oportunidad, además de un foro de encuentro para los andaluces del sector, para el público, profesionales y medios".

La industria andaluza hace gala de más documentales, como El Berah, un proyecto colectivo formado por cuatro cortometrajes (Ali Salem, Inshallah, Iselmo y Belgha). Gitanos de Buenos Aires cuenta la historia de David Amaya un guitarrista flamenco que se va a Buenos Aires y descubre una comunidad de gitanos de origen andaluz.

Una mirada libre narra cómo el Grupo Afal, un colectivo de jóvenes fotógrafos, en la Almería de los cincuenta, revolucionó la fotografía española. Final de trayecto se acerca a la estación abandonada de Las Alcantarillas para ahondar en los recuerdos de sus habitantes.

Mañana será otro día se centra en un grupo de personas mayores aficionadas al teatro. Don Juan de la Carlina, la cara oculta de León Degrelle reconstruye la vida oculta del líder fascista belga en España.

Entre los cortometrajes que se presentan predomina el terror. Se proyectarán en una sesión especial M, ¿Nunca seré nadie?, de Jero de los Santos; REM, de Mario Venegas, y Sweet blood, de Julián Lara, protagonizado por Rafael Amargo.

El largometraje de animación de esta edición, tras el éxito del año anterior por El lince perdido, será Las aventuras de Don Quijote, que se proyectará en sesión especial infantil, como La Banda en la Isla de la Magia protagonizada por los chicos del programa infantil de Canal Sur.

Estas películas pueden gustar a los chicos del Instituto Antonio Domínguez Ortiz, situado en el barrio desfavorecido de Sevilla del Polígono Sur, aunque probablemente les haga más ilusión verse en el documental que protagonizan, La escuela expandida, producida por Zemos 98 e Intermedia. "Para nosotros será lo más bonito de ir a festival, ver a los chavales en una pantalla grande y demostrar que la educación no tiene que ver con fronteras y que la educación se encuentra en cualquier lugar. También en el festival", concluye Felipe González.