Osakidetza y sindicatos ahondan la pugna por las disputas laborales
La principal área de la Administración vasca no tiene convenio desde 2010
Cuatro años sin convenio colectivo, negociaciones bloqueadas, desarrollo de la carrera profesional paralizado, una OPE convocada en 2011 y que todavía no se ha resuelto, y cruce de acusaciones entre los sindicatos con representación en Osakidetza y el Departamento de Salud dibujan un panorama bronco en la principal área de la Administración pública vasca. A la sanidad, Euskadi destina aproximadamente cada año el 30% del presupuesto, unos 3.350 millones, y emplea a cerca de 34.000 trabajadores, si se suman los fijos (26.000) y eventuales.
El principal servicio público vive un momento convulso y poco parece que pueden hacer las promesas tanto de la consejería —el titular de Salud, Jon Darpón, ha anunciado la convocatoria de dos OPEs— como del propio Gobierno vasco —el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha defendido que Osakidetza será la prioridad de los próximos presupuestos—, para intentar apaciguar a las centrales.
El próximo 22 de octubre, representantes de los trabajadores y del Departamento volverán a sentarse a negociar después de que el último encuentro, celebrado en septiembre, se cerrase con un nuevo cruce de acusaciones entre las dos partes y sin avances. También los trabajadores —los sindicatos registrarán hoy la convocatoria de cinco días de paros entre noviembre y diciembre—, volverán a salir a la calle para protestar por lo que entienden es un ataque contra un servicio fundamental.
Euskadi destina 3.350 millones a Salud, el 30% del presupuesto
De hecho, fue en el transcurso de una protesta convocada a principios de mes, a las puertas del Bizkaia Aretoa, cuando el lehendakari espetó a los sindicalistas que gritaban tras una pancarta si ese era su puesto de trabajo habitual. Una imagen que enturbió un poco más las relaciones.
La lista de reivindicaciones de los trabajadores de Osakidetza es larga. El mantenimiento del empleo ocupa uno de los primeros puestos. Las centrales recuerdan que desde el inicio de la crisis la Administración ha dejado de contratar a 3.000 empleados eventuales, según explica el secretario general de la Federación de Sanidad de CC OO de Euskadi, Iñigo Garduño. Para los trabajadores, coincide Encarnación Sáenz de la Maza, secretaria de Organización de Satse, el sindicato de enfermería, resulta primordial la defensa de un trabajo digno, no solo para aquellos que cuentan con plaza fija.
“Hace falta una normativa de empleo temporal, que sea transparente y permita que estas personas sean contratadas en unas condiciones dignas, que se escapen de días sueltos, que no tengan que estar permanentemente atentas por si se les llama o no. Como mínimo hacen falta 700 enfermeras o enfermeros más para poder prestar un servicio de calidad”, apunta Sáenz de la Maza, que recuerda que el colectivo al que representa supone 7.000 empleos fijos, y unos 2.000 eventuales, según cifras de antes de la crisis.
Pero también los trabajadores reclaman la vuelta a una jornada laboral de 35 horas semanales, el desarrollo de la carrera profesional (bloqueado por la consejería desde 2011), la mejora de las condiciones salariales y la aprobación de un convenio que garantice sus derechos. La lista se completa con exigencias de transparencia a la consejería, el rechazo a la externalización de servicios y denuncias contra las acusaciones que ha vertido el Departamento contra ellos.
Los sindicatos registrarán este lunes la convocatoria de cinco días de paros
Ante las críticas y reivindicaciones de los trabajadores, Osakidetza recuerda el difícil momento por el que atraviesa la sociedad. “Todos nos encontramos en una coyuntura económica difícil y somos conscientes de que a los trabajadores de Osakidetza se les está pidiendo un esfuerzo y desde el primer momento, hemos reconocido este trabajo añadido, como también hemos afirmado que en la medida que las condiciones vayan evolucionando positivamente trataremos de mejorar las condiciones de nuestros profesionales”, apunta el director de Recursos Humanos de Osakidetza, José María Armentia.
Armentia además añade que los profesionales de la sanidad pública vasca cuentan con una jornada anual de 1.614 horas, menor que la que tienen los profesionales de otras comunidades, y con un salario mayor. Y defiende que el servicio que presta Osakidetza, como han denunciado los sindicatos, no se ha resentido. “Vamos a garantizar, por encima de todo, una Osakidetza pública y de calidad”, apostilla.
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