El PP no puede dejar que la oposición dura que promete al Gobierno comprometa su apoyo histórico a cuestiones migratorias, tan importantes en las próximas elecciones europeas
La decisión de Feijóo de que el debate girara exclusivamente sobre los acuerdos de Sánchez con los independentistas le deja colgado de una rama seca: la constitucionalidad o no de la ley de amnistía
No se comprende bien por qué es necesario que el Partido Socialista acepte que las reivindicaciones, no de los independentistas, sino de “la sociedad catalana” en su conjunto “tienen un profundo recorrido histórico”
Sánchez mantiene a medio país sin aliento en relación con una hipotética amnistía que muchos se empeñan en dar por hecha, pero de la que él no ha dicho palabra
El escritor formó parte del equipo fundador de EL PAÍS, ayudó a crear la cultura profesional del diario, fue su cronista parlamentario en la Transición y su gran experto jurídico. Falleció esta mañana en Madrid, víctima de un cáncer
El mayor problema del PP ha sido convertir cuatro años de oposición política en una batalla sin cuartel en todas direcciones que a la postre lo ha dejado en manos de Vox y le ha amputado cualquier posibilidad de negociar con cualquier otro socio
Antes de usar sus afiladas lenguas contra sus compañeros, algunos socialistas y podemitas podían pedir que gane quien gane las elecciones, no se debe volver a ejercer así la oposición
Normalizar a la formación de Santiago Abascal es un error que el Partido Popular puede pagar caro en Europa, porque lo obligaría a alinearse con quienes frenan la Unión
La campaña podría tener una virtud especial: permitir que Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo expliquen de una vez qué partido quieren, lo que en estos momentos no está claro para muchos de sus electores
La corrupción política se investiga y se sanciona en España. La policía y los fiscales hacen su trabajo cada vez mejor. Lo que no está nada claro es que tenga una repercusión en el voto
Para los votantes de izquierda, la continuidad de un Gobierno de coalición tras las próximas elecciones es la única garantía de no retroceder en los avances sociales y de derechos civiles conseguidos desde 2019