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Raiza Carrera, la limeña que agita sabores y tendencias en Madrid

Reconocida como mejor ‘bartender’ de España en la última edición de Fibar, defiende una coctelería sin etiquetas

Raiza Carrera, en plena elaboración de un cóctel.
Raiza Carrera, en plena elaboración de un cóctel.D. R.
Abraham Rivera

Raiza Carrera (Lima, 28 años) ganó el año pasado el principal galardón que hay en el mundo de la coctelería española: Mejor Bartender 2023, entregado por Fibar, la feria más importante del sector. Era la primera mujer que lo hacía, después de 11 ediciones. “Aunque parezca un cliché, se me hizo raro escuchar mi nombre. De todos modos, creo que también es un premio para todas aquellas personas que me han apoyado y para la nueva generación de bartenders. Ha sido algo muy lindo”, confiesa esta peruana que ahora vive en Madrid, donde ya se ha instalado y pretende montar su primer bar. “De momento estoy viendo los ciclos de la ciudad y conociendo las distintas zonas”, explica.

El vieux carré es uno de sus cócteles imprescindibles.
El vieux carré es uno de sus cócteles imprescindibles. D. R.

Ella, mujer de mundo, formada en algunas de las coctelerías de más relumbrón de Barcelona, como es el caso de Collage o Libertine, además de en Buenos Aires, a los mandos de Fede Cuco, se ha dedicado durante el último año a transmitir su proyecto por los cinco continentes. “Hay mucha hospitalidad y tragos que mezclan las dos vertientes que más me interesan: el maximalismo y el minimalismo. En mis elaboraciones el resultado siempre es algo limpio y estético. Me interesa desde la coctelería clásica a los clarificados”, comenta en forma de resumen de una propuesta nómada que le ha permitido visitar países como Singapur, México o Italia. Bajo el nombre de Agite, Carrera ha transmitido su profunda visión del cóctel.

“Lo que me gusta, lo adapto a mi estilo”, señala de unas combinaciones que mezclan sin disimulo la tradición europea, la asiática y la latinoamericana. Una de sus creaciones más fascinantes lleva chicha morada, licor de chipotle y pisco, por ejemplo. Sus próximos movimientos también tienen que ver con charlas y encuentros, en ellos habla de una coctelería sin etiquetas, que no esté reglada por el género, como se nos ha hecho creer durante tantos años. “Como toda lucha y como todo movimiento que busca la igualdad, todavía falta muchísimo. Se ha avanzado y hay más visibilidad, pero también es una responsabilidad para nosotras, debemos de estar a la altura”, reflexiona, “es necesario que sigamos trabajando y preparándonos profesionalmente”.


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Sobre la firma

Abraham Rivera
Escribe desde 2015 para EL PAÍS sobre gastronomía, buen beber, música y cultura. Antes ha sido comisario de diversos festivales, entre ellos Electrónica en Abril para La Casa Encendida, y ha colaborado con Museo Reina Sofía, CA2M y Matadero. También ha presentado el programa Retromanía, en Radio 3, durante una década.

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